El Defensor del Paciente ha detectado un aumento de las quejas de pacientes por la atención recibida durante el parto. Esto ha llevado a remitir un escrito a la ministra de Justicia en funciones, Dolores Delgado García, y a las consejerías de sanidad y salud de las diferentes comunidades autónomas en el que denuncia el uso excesivo de instrumental como forceps o palas en los partos, cuestión que achaca a las largas esperas que sufren las parturientas desde que reciben la epidural hasta que finalmente dan a luz.
Con esto, aseguran desde la asociación en declaraciones recogidas por Las Provincias, “se las regala un sufrimiento físico y mental al ver que su hijo no sale; y consecuencias graves, como bebés que necesitan rehabilitación tras el parto, bebés que, por el tiempo transcurrido, se colocan mal y necesitan un casco corrector o sufren hasta parálisis braquial”, entre otras.
En 2017 nacieron 147 bebés con malformaciones por negligencias durante el parto
Por otra parte, el Defensor del Paciente incluye en la misiva otra petición, derivada también de las quejas recibidas, y que se centra en que se impida que el personal sanitario “salga con la misma ropa con la que están en el hospital -batas, zapatos, gorros, etc.- a fumar, tomar café o todo lo que tengan derecho hacer por necesidad de relajación, que bien la necesitan, pero sin que con ellos pasen a los servicios bacterias”.
Por último, desde la asociación recuerdan algunos de los últimos casos graves en los que ha tenido que intervenir y proporcionar asesoramiento legal, como el de la familia de Castellón que ha presentado una denuncia al sospechar que a su bebé le amputaron una pierna por un error.
Según datos de la propia asociación, solo en 2017 cerca de 150 bebés nacieron con alguna discapacidad en relación a partos llevados de forma inadecuada o con fórceps, causando secuelas como sufrimiento fetal, parálisis cerebral o parálisis bronquial.
Desde el Defensor del Paciente denuncian que en muchos casos los ginecólogos no informan a los padres durante el parto de que el feto tiene alguna malformación lo que provoca que en muchos casos los bebés acaben falleciendo a las pocas horas de nacer.