Los síntomas que pueden manifestarse durante la menopausia, como sofocos, alteraciones del ciclo menstrual, sudoraciones nocturnas, insomnio, cambios de humor o síndrome premenstrual, pueden afectar a la calidad de vida de las mujeres que los padecen.
Frente a ello, la terapia hormonal (THM) es el tratamiento que ha demostrado una mayor efectividad a la hora de prevenir los síntomas de la menopausia. Se trata de un tratamiento que consiste en la administración de hormonas exógenas que el cuerpo ha dejado de producir como consecuencia del inicio de la menopausia, una etapa de la vida de la mujer en la que cesa su actividad ovárica.
La terapia hormonal en la menopausia consiste en la administración de hormonas exógenas que el organismo ha dejado de producir como consecuencia del inicio de la menopausia
Estos tratamientos hormonales pueden encontrarse en distintos formatos de aplicación, entre los que se encuentran comprimidos de administración oral, parches que se aplican en la piel, cremas o geles vaginales, así como nuevos dispositivos que contienen soluciones para pulverización transdérmica.
Con los tratamientos de terapia hormonal se logra reducir el impacto de síntomas como la sequedad vaginal, las sudoraciones nocturnas, los episodios de incontinencia urinaria o los trastornos depresivos, mejorando la calidad de vida de la mujer. Además, numerosos estudios sugieren que, en mujeres menores de 60 años, esta terapia hormonal disminuye los factores de riesgo cardiovascular, reduciendo el riesgo de sufrir una enfermedad coronaria; mejora la densidad mineral ósea (previniendo la osteoporosis) y la atrofia urogenital, otras afecciones asociadas a la menopausia.
Si padeces alguno de los síntomas de la menopausia, los expertos aconsejan acudir a tu ginecólogo/a para que te recomiende el tratamiento más adecuado a tu situación clínica particular.