El enfoque ‘One Health’ tomó forma en el mes de octubre de 2008 como una estrategia para contribuir a un mundo más seguro para todos. Este concepto precisa de un enfoque multisectorial en el que todos los ámbitos relacionados con la salud global aúnen fuerzas para luchar contra los retos de salud pública como las enfermedades humanas, las zoonosis, la resistencia a los antimicrobianos o la salud del medio ambiente.
La Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) define ‘Una Salud’ como “más que un simple concepto”. La entidad asegura que este enfoque “muestra el mejor camino para hacer frente a muchas enfermedades zoonóticas”. La interfaz humano-animal-medio ambiente necesita de gestiones sólidas que evalúen los riesgos y emprendan acciones para un mundo mejor. Este concepto, propagado y consolidado en toda la sociedad, toma protagonismo cada 3 de noviembre, fecha en la que se conmemora el Día Mundial del 'One Health' para concienciar de su importancia.
“Médicos y veterinarios crean un marco de trabajo para abordar los problemas que preocupaban a la población mundial en el 2008: la posibilidad de una pandemia de gripe”, contextualiza Santiago Vega, catedrático de Sanidad Animal de la Facultad de Veterinaria de la Universidad CEU Cardenal Herrera de Valencia, en declaraciones a ConSalud.es, con motivo de la celebración de esta efeméride.
“La estrategia One Health es la única forma de abordar todos los problemas de salud del planeta”
En el marco del peor brote de gripe a nivel mundial, los profesionales de la salud humana y animal “crean un marco estratégico para abordar las enfermedades infecciosas y la relación que hay entre personas, animales y medio ambiente”, afirma Vega. En este sentido, el vínculo entre humanos, animales y el entorno natural, conduce a la creación de una estrategia que, en palabras del veterinario, se asienta sobre tres pilares fundamentales: enfermedades zoonósicas, resistencia a los antimicrobianos y seguridad alimentaria.
Estas tres vertientes son esenciales para el abordaje de los problemas de salud global que experimenta y experimentará la población mundial. “La estrategia 'One Health' es la única forma de abordar todos los problemas de salud del planeta”, asevera Vega. Este enfoque garantiza los logros con vistas a anticipar, prevenir y controlar los problemas de salud, incluyendo la lucha contra las resistencias y los problemas relativos a la inocuidad de los alimentos.
‘UNA SALUD’ FRENTE A LAS ZOONOSIS
Las zoonosis provocan más de 2,5 millones de muertes al año en todo el mundo. En total, 2.500 millones de enfermedades humanas podrían estar relacionadas con la propagación de zoonosis. Zika, chikungunya o dengue son algunas de las infecciones contra las que luchan algunos países sin obtener resultados positivos.
Los vectores portadores de estas enfermedades “están llegando a zonas donde antes no estaban”. Este avance está motivado por acciones como la crisis climática a la que se enfrenta el planeta. Sin embargo, en esta nueva realidad, “tendremos que acostumbrarnos a que no vamos a estar exentos de vectores en todo el año”, asegura el veterinario.
“Si no podemos acabar con los vectores, los virus o las bacterias, debemos replantearnos las circunstancias para cambiar esos paradigmas y adelantarnos a los problemas”
Frente al avance de los vectores transmisores de enfermedades y el aumento de las zoonosis, Vega recuerda la importancia de “generar nuevas estrategias para luchar contra estos vectores que, aunque es imposible que los erradiquemos, sí podemos reducir su presencia”.
En el desarrollo de estas estrategias es esencial el abordaje multisectorial. Vega señala a médicos, veterinarios, farmacéuticos, enfermeros y todos los implicados en el sector de la salud dentro de la interfaz humano-animal-medio ambiente. Los profesionales deben completar tres líneas de actuación esenciales: formación, divulgación y comunicación, destaca el veterinario. En este sentido, Vega insiste en que “si no podemos acabar con los vectores, los virus o las bacterias, debemos replantearnos las circunstancias para cambiar esos paradigmas y adelantarnos a los problemas”.
UNA CAMPAÑA GLOBAL FRENTE A LA CRISIS CLIMÁTICA
“En lugar de acelerar las medidas de adaptación contra el cambio climático, las estamos retrasando”, informaba el pasado 2 de noviembre la Organización de Naciones Unidas (ONU). Uno de los grandes retos del enfoque ‘Una Salud’ es enfrentar la crisis climática, una responsabilidad que recae no solo en los profesionales, sino también sobre la población mundial. “Los cambios que de forma natural se han ido produciendo, nosotros los estamos potenciando”, asegura Vega.
“De los nueve criterios para garantizar la continuidad de la especie humana en el planeta, ya hemos superado siete”
El veterinario argumenta la importancia de contribuir todos mediante una campaña global para frenar la crisis climática y cita a las Naciones Unidas: “De los nueve criterios para garantizar la continuidad de la especie humana en el planeta, ya hemos superado siete”. Sin embargo, esta situación puede revertirse y es parte de los objetivos del enfoque ‘One Health’ mediante el trabajo de todos.
La crisis climática está incrementando no solo la degradación de la naturaleza y la biodiversidad, sino también los niveles de polución que afectan directamente al hombre. La falta de salud ambiental es otro de los grandes frentes abiertos. “Al año mueren en el mundo 12,6 millones de personas por falta de salud ambiental y 7 millones de ellos lo hacen por las enfermedades respiratorias asociadas a la falta de calidad del aire”, recuerda el experto.
LAS RESISTENCIAS ANTIMICROBIANAS, LA NUEVA PANDEMIA SILENCIOSA
A la lucha contra las zoonosis y la crisis climática se suman las resistencias antimicrobianas. El Banco Mundial estima que en 2050, si no se encuentran nuevos antimicrobianos, podrían morir 10 millones de personas fruto de las resistencias. “En Europa todos los días mueren cien personas por resistencias a los antimicrobianos”, asegura el veterinario.
El principal problema al que se enfrenta esta lucha es la falta de concienciación social ante las resistencias humanas o los saltos de animales a personas. El sector veterinario, azotado durante años por el uso de antibióticos para el crecimiento de animales, ya ha hecho frente a esta problemática reduciendo prácticamente en su totalidad este método.
“No hay una salud animal, una salud humana y una salud del medio ambiente”
Ahora, esta lucha está en manos de los consumidores o los propietarios de animales. Por este motivo, Vega recuerda la implicación individual ante los tratamientos antibióticos prescritos por los especialistas. Gracias a una responsabilidad global es posible frenar las resistencias que se han producido a los antibióticos en los últimos años y que generan millones de muertes a nivel mundial.
Vega destaca que, detrás de todo esto, “solo hay una salud”. “No hay una salud animal, una salud humana y una salud del medio ambiente”, reitera el experto, porque la lucha contra las enfermedades, las zoonosis, la crisis climática y la resistencia a los antibióticos “es una responsabilidad de todos”.