El Instituto de Salud Global (ISGlobal) Barcelona ha elaborado un documento que propone una serie de recomendaciones de políticas basadas en los conocimientos científicos actuales, en el que se urge a armonizar las directivas europeas sobre la calidad del aire con las normas de la Organización Mundial de la Salud (OMS), así como gestionar las fuentes de contaminación con una "estrategia combinada" con sectores como la industria o la agricultura.
Se trata de un documento de análisis que propone una serie de recomendaciones de políticas para implementar los planes de calidad del aire en los países europeos, ha informado el instituto este martes en un comunicado.
El documento analiza los efectos de la contaminación atmosférica sobre la salud
Los cambios propuestos en las directivas europeas supondrán normas de calidad del aire más estrictas para 2030, "más en línea con las recomendadas por la OMS", y nuevos requisitos para controlar contaminantes como las partículas ultrafinas.
Para lograr este objetivo a tiempo, los investigadores de ISGlobal creen que los países "deben estar preparados y desarrollar los planes y medidas de calidad del aire necesarios antes de 2030".
Por otro lado, ha apostado por gestionar las fuentes de contaminación para reducir las emisiones y mejorar la calidad del aire, y concretamente adoptar medidas destinadas a limitar las emisiones del transporte, que "es la principal fuente de contaminación".
SE PLANTEA UNA ESTRATEGIA COMBINADA EN INDUSTRIA Y AGRICULTURA
ISGlobal ha apuntado que las directivas sobre la calidad del aire ambiente (CAA) y la implementación de las nuevas normas de emisiones Euro 7 son necesarias pero "deberían complementarse con legislación dirigida a otros sectores, como la industria y la agricultura".
El documento también ha propuesto el derecho a indemnizaciónde las personas que han visto afectada su salud como consecuencia de la contaminación atmosférica, y "manifestar la importancia de las desigualdades sociales en los efectos de la contaminación atmosférica sobre la salud".
Por último, se considera "imprescindible" que las autoridades locales respalden la lucha contra la contaminación atmosférica, mediante la creación de zonas de bajas emisiones o fomentar cambios en el transporte, y mejorar la información, educación y sensibilización sobre las medidas para la calidad del aire.