Por su alta exposición al sol y al oxígeno en el aire, los ojos son especialmente susceptibles al estrés oxidativo, causante de diversas patologías oculares. Uno de los antioxidantes más presentes en los ojos para combatir este estrés oxidativo es el glutatión, cuyo déficit se asocia a diversas enfermedades oftalmológicas. El grupo de investigación de la Universidad CEU Cardenal Herrera (CEU UCH) de Valencia liderado por la profesora Alicia López Castellano, especializado en el desarrollo de nuevas formas farmacéuticas para la administración de fármacos por vía transdérmica y oftálmica, ha diseñado un nuevo inserto ocular para administrar antioxidantes a través de la córnea y la esclera o blanco del ojo. Su estudio, publicado en la revista científica internacional Pharmaceutics, analiza las ventajas de esta forma novedosa de administración, frente a las gotas oftálmicas convencionales.
Los investigadores esperan que estas nuevas fómurlas lleguen al mercado y supongan un avance significativo en la eficacia de los tratamientos para los tejidos oculares
Según explica la profesora de la CEU UCH María Sebastián, miembro del equipo investigador, “la estructura anatómica y fisiológica de los ojos constituye, en sí misma, una barrera importante para la administración de fármacos. La cantidad de fármaco que atraviesa la córnea o la esclera aplicando gotas, geles o cremas es muy limitada y es necesario desarrollar fórmulas alternativas más eficaces. Por eso, trabajamos desde hace varios años en el desarrollo de insertos oculares bioadhesivos, para mejorar el tratamiento de enfermedades oculares, aumentando el tiempo de permanencia del fármaco en el ojo y que sea liberado paulatinamente, penetrando mejor a través de los tejidos oculares”. Tras su trabajo sobre la administración de antibióticos a través de la córnea con este tipo de insertos, en este último estudio el equipo de la CEU UCH ha testado la administración de un antioxidante, esta vez a través de la córnea y la esclera, mediante el mismo tipo de insertos.
ANTIOXIDANTES OCULARES, COMBINADOS
Según destacan los investigadores de la CEU UCH en el estudio publicado en Pharmaceutics, el glutatión es el antioxidante natural más abundante en los ojos y su déficit está asociado a patologías de la retina, el tejido humano que más oxígeno consume: de ahí la necesidad de estar más protegido frente al estrés oxidativo, a través de la producción de glutatión.
Con la edad, disminuye la capacidad de generar este antioxidante, lo que puede favorecer la aparición de patologías oculares como la retinopatía diabética, el glaucoma o la degeneración macular asociada a la edad. La carencia de glutatión también se asocia a la aparición de cataratas y enfermedades degenerativas hereditarias, como la retinosis pigmentaria. “En este caso, hemos colaborado con el equipo que lidera en la CEU UCH la profesora María Miranda, que ya había estudiado el efecto beneficioso del glutatión para frenar la muerte celular de los fotorreceptores en un modelo experimental de esta enfermedad”, señala María Sebastián.
El inserto oftálmico formulado es capaz de liberar el antioxidante en el ojo
El estudio de la CEU UCH muestra que el inserto oftálmico formulado es capaz de liberar el antioxidante en el ojo. Una de las ventajas de estos insertos es que pueden ser aplicados un menor número de veces que las gotas oftálmicas, además de controlar la liberación del fármaco, proporcionando una administración más cómoda para el paciente. Para diseñar el mejor inserto oftálmico, el equipo investigador ha estudiado la difusión del glutatión a través de la córnea y de la esclera utilizando como modelo animal el ojo de conejo. Además, han comprobado que el glutatión no causa irritación en la mucosa ocular y que puede conservarse preservando sus propiedades durante un mes a una temperatura de 4oC, en la oscuridad.
“Esperamos que en un futuro muy próximo estas nuevas fórmulas de administración mediante insertos oculares, en este caso para antioxidantes, lleguen al mercado y supongan un avance significativo en la eficacia de los tratamientos para los tejidos oculares”, concluyen los autores del estudio. Junto a las investigadoras María Sebastián, Alicia López y María Miranda, han formado también parte del equipo Adrián Alambiaga, Aracely Calatayud, Vicente Rodilla y Cristina Balaguer, todos ellos profesores investigadores de la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad CEU Cardenal Herrera de Valencia.