El Instituto Nacional de Excelencia en Salud y Atención (Nice), organismo dependiente de la Sanidad Pública (NHS) en Inglaterra ha propuesto crear un registro del consumo de de alcohol de las mujeres embarazadas para que este figure en el historial médico del recién nacido.
Tras la noticia, las reacciones no se han hecho esperar y la propuesta ha sido criticada por vulnerar el derecho a la confidencialidad médica.
En el nuevo registro aparecerá el más mínimo consumo de alcohol desde la primera semana de embarazo
Tal y como se hace eco El Periodico, en el nuevo registro aparecerá el más mínimo consumo de alcohol desde la primera semana de embarazo. Todo ello con o sin el consentimiento de la mujer. Una información que quedaría reflejada en el historial de la madre y transferida después al del bebé.
La iniciativa, que pretende identificar el riesgo de que el feto pueda sufrir síndrome alcohólico fetal, no ha sido bien acogida por expertos legales y la organización benéfica Servicio Británico de Asesoramiento sobre Embarazo (BSAP) advierten en cambio que se vulneraría la legislación vigente sobre protección de datos.
Asimismo, organizaciones como Adoption UK o el Colegio de Obstetras y Ginecólogos comparte ese temor y creen que hay otras medidas posibles.