El Hospital Universitario Rey Juan Carlos ha organizado las "II Jornadas informativas para pacientes con EII". Todo ello potenciado desde la Unidad de Enfermedad Inflamatoria Intestinal del centro sanitario, desde donde los especialistas insisten en la importancia de que el paciente tenga información sobre su patología. “Un mayor conocimiento de esta es muy importante en su evolución y cuidado”, asegura por su parte el doctor Carlos Castaño Milla, jefe del Servicio de Aparato Digestivo del hospital.
Esto se debe a que, cuando la comunicación entre médicos y paciente es más fluida y se basada en la confianza mutua, "es más sencillo comprender las recomendaciones clínicas en torno al tratamiento y su adecuado cumplimiento”, explica el facultativo. Por todo ello, en estas jornadas se trata de dar “explicaciones detalladas de todos los aspectos que pueden resultarles útiles para saber cómo actuar en determinadas situaciones de su vida cotidiana en las que puede influir tener esta enfermedad”, detalla el doctor José Antonio Olmos Jerez, especialista del Servicio de Aparato Digestivo del hospital.
“Hoy en día no podemos curar la EII, pero sí predecir su evolución, sabiendo que una de sus características principales es que alterna periodos de actividad, conocidos como ‘brotes’, y de descanso (remisión)”, ha incidido el doctor Castaño sobre esta enfermedad que abarca patologías tales como la enfermedad de Crohn, la colitis ulcerosa y la colitis indeterminada; y cuyo origen es desconocido.
LAS PERSONAS CON EII PUEDEN TENER UN EMBARAZO SIN COMPLICACIONES
Del mismo modo, durante las jornadas se abordó el tema del embarazo y lactancia en pacientes con EII. El doctor Luis Wesley Wong Becerra, también especialista del Servicio de Aparato Digestivo, ha apuntado a que “la mayoría de las pacientes con EII pueden tener un embarazo sin mayores complicaciones, con un curso similar al de una mujer gestante sin la patología”.
“Hoy en día no podemos curar la EII, pero sí predecir su evolución, sabiendo que una de sus características principales es que alterna periodos de actividad, conocidos como ‘brotes’, y de descanso (remisión)”
“Lo fundamental es planificar el embarazo en el momento en el que la enfermedad se encuentre inactiva o en remisión para evitar posibles complicaciones durante la gestación ya que, si la EII se encuentra activa, existe mayor riesgo de complicaciones como parto prematuro, abortos espontáneos y bajo peso al nacer”, ha indicado, añadiendo: “Una vez confirmada la gestación, la mujer debe seguir los controles generales, acudir al gastroenterólogo para ajustar el tratamiento de la patología, y al ginecólogo para valorar el crecimiento fetal en el segundo y tercer trimestre”.
En cuanto al periodo de lactancia, el especialista ha recordado que es muy importante mantener el tratamiento, al igual que durante el embarazo, para prevenir posibles brotes de la enfermedad que puedan poner en riesgo la salud de la madre y del feto. Sin embargo, existen algunos fármacos que están contraindicados, como el metotrexato, por lo que, en todo caso, “es fundamental la valoración del especialista al respecto”, ha concluido.