El 90% de la población adulta en España se ha infectado de virus de la varicela zóster, según datos del Ministerio de Sanidad. Este es el causante del desarrollo de la enfermedad de herpes zóster cuando el paciente envejece o se encuentra en una situación inmunitaria comprometida, momento en el que el virus se reactiva y genera esta manifestación neurocutánea. Una patología con una letalidad del 8% y con importantes complicaciones como la neuralgia postherpética, pero todo ello prevenible.
“Las vacunas frente a la varicela y el herpes zóster pueden modificar la historia natural de la infección por el virus de la varicela zóster”, destacan los autores de un estudio publicado recientemente en la revista ‘Vacunas’. Actualmente la vacuna recombinante, disponible en España, está dirigida a los pacientes mayores y a aquellos inmunodeprimidos, como los receptores de trasplante progenitores hematopoyéticos, tumores sólidos o VIH.
En España el coste del tratamiento del herpes zóster y de la neuralgia por paciente fue de 240 y 571 €, en el ámbito sanitario del Sistema Nacional de Salud
Esta vacuna es bien tolerada y muestra una eficacia del 97,2% en los adultos sanos de 50 años o más y superior al 88% frente a la neuralgias postherpética. En los pacientes inmunocomprometidos la eficacia de esta medida supera el 80% e incluso podría mantenerse durante 20 años o más. De esta forma se reduce la incidencia de esta patología y, con ello, el gasto sanitario y sociosanitario que supone.
En los últimos años las hospitalizaciones por herpes zóster ha crecido en muchos países, principalmente por el impacto de la pandemia Covid-19 en los sistemas sanitarios y la salud de los pacientes. Estas hospitalizaciones suponen un importante gasto médico de hasta 7.152 euros por pacientes, 100.433.904 euros en total, según destacó un estudio publicado en la revista ‘Human Vaccines & Inmunotherapeutics’.
En España, según recoge el estudio citado publicado en ‘Vacunas’, el coste del tratamiento del herpes zóster y de la neuralgia por paciente fue de 240 y 571 €, en el ámbito sanitario del Sistema Nacional de Salud. Si se añaden los costes no sanitarios, los sociales, el coste aumenta a 296 y 712 €, respectivamente.
EL PAPEL DE ATENCIÓN PRIMARIA
Los actuales tratamientos han demostrado su eficacia frente al herpes zóster, no así frente a sus complicaciones como la neuralgia postherpética. Esta complicación tiene un importante impacto en la calidad de vida de los pacientes, con un dolor cronificado, y cuenta con distintas líneas de tratamiento que no siempre son efectivas en todos los pacientes.
La única forma de prevenir el desarrollo del herpes zóster y de sus complicaciones es la vacuna. En España a partir de este año 2024 todas las comunidades autónomas contarán en sus calendarios de vacunación para toda la vida con esta herramienta preventiva, tras el anuncio por parte de Andalucía que será este año en el que se iguale al resto de autonomías e incluya las pautas de esta vacuna en los pacientes de riesgo, bien por edad o por su condición sanitaria.
“Los profesionales de AP tienen un papel fundamental de educar a la población sobre la importancia de prevenir ciertas enfermedades inmunoprevenibles"
La vacunación de las personas en riesgo de la reactivación del virus de la varicela zóster está financiada para diferentes cohortes según la región, pero la vacuna está disponible en las farmacias para cualquier persona que quiera inmunizarse frente a esta patología. En este sentido, los autores del estudio destacan la importancia de la concienciación desde Atención Primaria (AP).
“A pesar de los avances realizados, la vacunación en los adultos es una práctica mucho menos extendida que en la población pediátrica”, denuncian en el estudio. La vacunación de adultos depende de campañas anuales, principalmente frente a la gripe, a diferencia del modelo sistemático pediátrico, un ejemplo que los profesionales llaman a duplicar en los mayores. La vacunación en este grupo de edad “cumple una función dual: reducir la carga de la enfermedad y preservar la calidad de vida de los pacientes durante más tiempo”.
“Los profesionales de AP tienen un papel fundamental de educar a la población sobre la importancia de prevenir ciertas enfermedades inmunoprevenibles que pueden impactar de forma notable en su calidad de vida, como el herpes zóster”, señalan al recordar que la falta de información, las modificaciones frecuentes de los calendarios vacunales, la escasez de tiempo en la consulta o la falta de sistemas de registro centralizado dificultan la vacunación. Y para evitarlos los profesionales de Primaria son los principales actores que pueden fomentar la inmunización debido a su mayor contacto con los pacientes. “La vacunación sigue constituyendo una de las medidas sanitarias más coste-efectivas”, recuerdan los autores del estudio.