Uganda ha declarado este 11 de enero de 2023 el final del brote de ébola en menos de cuatro meses después de que se confirmase el primer caso en el distrito central de Mubende el pasado 20 de septiembre de 2022.
La ministra de Salud de Uganda, la doctora Jane Ruth Aceng Acero, ha explicado que el país ha logrado poner fin rápidamente al brote de ébola “al intensificar las medidas de control clave como la vigilancia, el rastreo de contactos y casos”. “Si bien ampliamos nuestros esfuerzos para implementar una respuesta sólida en los nueve distritos afectados, la varita mágica han sido nuestras comunidades que entendieron la importancia de hacer lo necesario para poner fin al brote y tomaron medidas”, ha declarado.
Este ha sido el primer brote de ébola en el país en una década y el quinto para este tipo concreto: ébolavirus de Sudán. De acuerdo con los datos publicados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) en total se han registrado 164 casos (142 confirmados y 22 posibles), 55 muertes confirmadas y 87 pacientes recuperados. Más de 400 personas que han tenido contacto con casos confirmados han sido monitorizadas durante 21 días. En general, la tasa de letalidad de este brote ha sido del 47%. El último paciente fue dado de alta el 30 de noviembre, fecha en la que se inició la cuenta atrás de 42 días para declarar el fin del brote.
“Felicito a Uganda por su sólida e integral respuesta que ha resultado en la victoria hoy sobre el ébola”, ha expresado el director general de la OMS, el doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus. “Uganda ha demostrado que se puede derrotar al ébola cuando todo el sistema trabaja en conjunto, desde las alertas, atención y monitorización de los pacientes y sus contactos hasta lograr la plena participación de las comunidades afectadas en la respuesta. Las lecciones aprendidas y los sistemas implementados para este brote protegerán a los ugandeses y a otros en los años venideros”.
Este brote ha estado provocado por el ébolavirus de Sudán, una de las seis especies del virus del ébola contra las que todavía no se han aprobado ni vacunas ni tratamientos. Sin embargo, la amplia experiencia de Uganda en la respuesta a enfermedades infecciosas ha permitido fortalecer rápidamente las áreas críticas en términos de respuesta y superar la falta de herramientas clave.
La OMS ha proporcionado casi 6,5 millones de dólares para la respuesta del brote
“Sin terapias ni vacunas, este ha sido uno de los brotes de ébola más desafiantes de los últimos cinco años, pero Uganda ha mantenido el rumbo y perfeccionado continuamente su respuesta. Hace dos meses parecía que el ébola arrojaría una sombra oscura sobre el país hasta bien entrado el 2023, ya que el brote alcanzó ciudades importantes como Kampala y Jinja, pero esta victoria supone una esperanza para África”, ha celebrado la directora regional de la OMS para África, la doctora Matshido Moeti.
Al poco de iniciarse el brote la OMS comenzó a trabajar con varios socios para identificar terapias y candidatos a vacuna para iniciar ensayos. A través de este trabajo se identificaron tres candidatos a vacuna y más de 5.000 dosis de estas llegaron al país en un primer lote el 8 de diciembre. Dos lotes adicionales fueron recibidos el 17 de diciembre. La velocidad con la que se ha desarrollado esta colaboración marca un nuevo hito en la capacidad global para responder a brotes de rápida evolución. “Si bien estos candidatos a vacuna no fueron utilizados durante el brote, la próxima vez que ataque el virus podemos reactivar la sólida cooperación entre desarrolladores, donantes y autoridades sanitarias para enviar candidatos a vacuna”, señala el doctor Yonas Tegegn Woldemariam, representante de la OMS en Uganda.
La OMS y sus socios han brindado su apoyo a Uganda desde el inicio del brote con el despliegue de expertos, brindando capacitación en el rastreo de contactos, pruebas y atención de pacientes, así como mediante la construcción de centros de aislamiento. Unos esfuerzos que permitieron que el tiempo de procesamiento de las muestras de ébola se redujese de unos pocos días a seis horas.
La agencia de salud de la ONU también ha ayudado en la protección de los profesionales sanitarios con un suministro constante de equipos de protección personal. La OMS ha proporcionado casi 6,5 millones de dólares para la respuesta del brote y tres millones de dólares adicionales destinados a la preparación de los seis países vecinos.
Aunque el final del brote ha sido declarado las autoridades sanitarias mantienen la vigilancia y se encuentran preparadas para responder de forma veloz ante cualquier otro brote. Se ha puesto en marcha un programa de seguimiento para ayudar a los pacientes recuperados y los países vecinos permanecen alerta y fortaleciendo sus capacidades con el objetivo de detectar y responder a los brotes de enfermedades infecciosas.