Tras el fallecimiento de una mujer de 56 años infectada por la variante de la gripe aviar A (H2N8) en China, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha asegurado que la transmisión de los virus de la gripe aviar de las aves a los humanos suele ser "esporádica" y ocurre en un contexto "específico", ya que la mayoría de las infecciones humanas anteriores se debieron a la exposición a aves de corral infectadas o ambientes contaminados.
En este sentido, la OMS ha asegurado que la información epidemiológica y virológica disponible sugiere que los virus de gripe aviar A(H3N8) no tienen la capacidad de transmisión sostenida entre humanos. Por lo tanto, la evaluación actual es que la probabilidad de propagación de persona a persona es baja y, por ello, el riesgo de que se propague entre humanos a nivel nacional, regional e internacional se considera bajo.
Sin embargo, debido a la naturaleza en constante evolución de los virus de gripe y dado que los virus de la gripe aviar continúan detectándose en las poblaciones de aves de corral, se esperan más casos esporádicos en humanos en el futuro. Por este motivo, la OMS continúa enfatizando la importancia de la vigilancia global para detectar cambios virológicos, epidemiológicos y clínicos asociados con los virus de influenza en circulación que pueden afectar la salud humana (o animal).
El reciente caso de la mujer fallecida es la tercera infección humana reportada con gripe aviar A(H3N8) de China, se informaron dos casos anteriores en abril y mayo de 2022. Uno de los casos anteriores desarrolló una enfermedad crítica, mientras que el otro tenía una enfermedad leve. Ambos casos probablemente adquirieron la infección por exposición directa o indirecta a aves de corral infectadas y, hasta el momento, no se han reportado casos adicionales vinculados con este caso, ni con los casos anteriores.
Según los informes de los funcionarios de salud, la investigación epidemiológica preliminar de este evento sugiere que la exposición a un mercado de aves vivas puede haber sido la causa de la infección. Sin embargo, aún no está claro cuál es la fuente exacta de esta infección y cómo se relaciona este virus con otros virus de la influenza aviar A(H3N8) que circulan en los animales.
La probabilidad de propagación de persona a persona es baja y, por ello, el riesgo de que se propague entre humanos a nivel nacional, regional e internacional se considera bajo
Además, la OMS ha informado de que se han llevado a cabo investigaciones epidemiológicas y rastreo de contactos cercanos y que no se han encontrado otros casos entre los contactos cercanos de los individuos infectados.
Debido a las tres infecciones detectadas en los últimos meses en China, la OMS ha informado de que el gobierno chino ha tomado medidas de vigilancia, prevención y control. Estas medidas incluyen la monitorización y desinfección mejorados en el entorno circundante de la residencia del paciente y las áreas sospechosas de exposición así como actividades de comunicación pública de riesgos para mejorar la concienciación ciudadana y la adopción de medidas de autoprotección.
Las infecciones por este virus en humanos pueden ser asintomáticas o pueden causar enfermedades. Dependiendo de los factores relacionados con el virus específico y el huésped infectado, la enfermedad puede variar desde conjuntivitis o síntomas leves similares a los de la gripe hasta una enfermedad respiratoria aguda grave o incluso la muerte. También se han informado síntomas gastrointestinales o neurológicos, pero estos son raros.
CONSEJOS DE LA OMS PARA EVITAR LA INFECCIÓN
Para minimizar el riesgo de infección, los países deben aumentar la conciencia pública sobre la importancia de evitar el contacto con entornos de alto riesgo, como mercados/granjas de animales vivos, aves de corral vivas o superficies que puedan estar contaminadas con aves o heces de aves. Además, se recomienda mantener una buena higiene de manos lavándose las manos con frecuencia o usando desinfectante para manos a base de alcohol y usando protección respiratoria cuando se encuentre en un entorno de riesgo.
La OMS desaconseja la aplicación de restricciones comerciales o de viaje según la información disponible en este momento
Dado el alcance y la frecuencia observados de los casos de gripe aviar en aves silvestres y algunos mamíferos silvestres, el público debe evitar el contacto con animales que estén enfermos o muertos por causas desconocidas y debe informar la ocurrencia a las autoridades.
Las personas que viajen a países con brotes conocidos de gripe animal deben evitar las granjas, el contacto con animales en los mercados de animales vivos, ingresar a áreas donde se puedan sacrificar animales o el contacto con cualquier superficie que parezca estar contaminada con heces de animales u otros fluidos corporales. Los viajeros también deben lavarse las manos con frecuencia con agua y jabón y seguir buenas prácticas de seguridad alimentaria e higiene alimentaria.
La OMS desaconseja la aplicación de restricciones comerciales o de viaje según la información disponible en este momento. No obstante, para prevenir una mutación viral que podría facilitar la transmisión de persona a persona, se ha recomendado a los trabajadores avícolas que se vacunen contra la influenza estacional.
Si se confirma o sospecha una infección humana con un nuevo virus de gripe que tiene potencial pandémico, como la gripe aviar, incluso antes de recibir resultados de laboratorio confirmatorios, se debe iniciar de inmediato el rastreo de contactos. Se debe realizar una investigación epidemiológica exhaustiva, que incluya antecedentes de viajes y exposición a animales.
La investigación también debe incluir la identificación temprana de grupos inusuales de enfermedades respiratorias que podrían indicar la transmisión del nuevo virus de persona a persona. Las muestras clínicas recolectadas en el momento y el lugar en que ocurrió el caso deben analizarse y luego enviarse a un Centro Colaborador de la OMS para una caracterización adicional.
Un análisis minucioso de la situación epidemiológica, una mayor caracterización de los virus más recientes encontrados en humanos y aves de corral, y las investigaciones serológicas son fundamentales para evaluar el riesgo y ajustar las medidas de gestión del riesgo de manera oportuna.