De 2023 a abril de 2024 se han notificado en Europa 57.000 casos de tosferina, diez veces más que en 2022 y 2021, según datos del Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC). Esta patología sin la previa protección inmunitaria puede llegar a provocar una enfermedad grave que conlleve hospitalización y en algunos casos fallecimiento entre los lactantes menores, el grupo de edad que ha presentado mayor incidencia durante el periodo de 2023-2024 en los países europeos. Los lactantes también son el grupo poblacional que ha recogido mayor tasa de mortalidad: el 58% de las 19 muertes de este periodo, uno de ellos aquí en España debido a que su madre no se había vacunado durante el embarazo.
Asimismo, esta enfermedad respiratoria causada por una infección bacteriana y que comienza como un catarro afecta a la población adolescente y a adultos jóvenes. En ellos no suele repercutir gravedad como en los lactantes, pero sí que han registrado una alta incidencia principalmente a principios de 2024, especialmente en países como Croacia, Dinamarca, Luxemburgo, República Checa o Eslovenia. "El aumento del número de casos de tosferina en toda Europa demuestra la necesidad de estar alerta. Se trata de una enfermedad grave, sobre todo en los lactantes”, ha recordado la comisaria de Salud y Seguridad Alimentaria de la UE, Stella Kyriakides.
El cuadro epidemiológico puede atribuirse también a la presencia de individuos no vacunados o vacunados al día y la disminución de la inmunidad
En los últimos años en Europa se ha registrado una circulación limitada de la bacteria 'bordetella pertussis' durante la pandemia Covid-19 que podría estar detrás del incremento tras ese periodo. Además, el cuadro epidemiológico puede atribuirse también a la presencia de individuos no vacunados o vacunados al día y la disminución de la inmunidad, recogen los expertos del ECDC.
VACUNACIÓN ANTES DE LA ADOLESCENCIA
La tosferina es una enfermedad endémica en Europa y en todo el mundo, incluso en países con altas coberturas de vacunación. Tanto en el continente como más particularmente en España, esta patología se mantiene con ondas epidémicas cada 3-5 años, tal y como constata el Comité Asesor de Vacunas de la Asociación Española de Pediatría (CAV-AEP). Con todo, la inmunización sigue siendo la medida más eficaz para evitar estos casos.
La vacuna combinada frente a la tosferina, difteria y tétanos (dTpa) es capaz de evitar nueve de cada diez hospitalizaciones en niños pequeños. “Disponemos de vacunas seguras y eficaces que pueden prevenirla. La vacunación es nuestra herramienta clave para ayudar a salvar vidas y evitar que la enfermedad siga propagándose", ha incidido Stella Kyriakides.
Sí es cierto, como recoge la CAV-AEP, que la inmunidad natural y vacunal tiene una duración muy corta. Por eso se administra de forma prenatal (una dosis en cada embarazo a partir de la semana 27 de gestación, pero preferentemente en la semana 27 o 28) y está recogida en el calendario de inmunización para toda la vida a los dos, cuatro y 11 meses, así como una nueva dosis a los seis años, y una dosis a partir de los 65 años.
Precisamente, la inmunidad natural y vacunal de corta duración, las variaciones antigénicas del agente etiológico, la mayor sospecha diagnóstica y la mayor accesibilidad de las pruebas de PCR como técnica diagnóstico son, según el CAV-AEP, las posibles causas de que la tosferina se diagnostique cada vez más. Ante ella, los expertos inciden en la necesidad de “reforzar el papel esencial de la vacunación, tanto de lactantes y niños como de mujeres embarazadas, para intentar contener la enfermedad”.
En España la cobertura de inmunización en embarazadas ha ascendido progresivamente del 79,9% en 2017 al 87% en 2021 y 2022
Una realidad que subrayan desde el ECDC es que “en muchos países, los programas de vacunación materna se utilizan para proteger a los lactantes en los primeros meses de vida. Sin embargo, los datos de cobertura, cuando están disponibles para dichos programas, parecen no ser óptimos”.
En el caso concreto de España la campaña de inmunización con la vacuna Tdpa en embarazadas comenzó en 2013. Desde 2017 la cobertura ha ascendido progresivamente del 79,9% al 87% en 2021 y 2022 según datos aportados en el Documento de consenso del CAV-AEP y la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO) publicado en la 'Revista Anales de Pediatría'. “En ese último año, todas las comunidades autónomas y Melilla están por encima del 80%, destacando La Rioja (99,4%), Canarias (91,3%), Asturias (91,1%) y Castilla La Mancha (90,2%). Baleares y Ceuta no ofrecieron datos”. Niveles, con todo, que no son los deseables, tal y como denunciaron hace unos meses desde la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria.
Esta estrategia se ha mostrado ser la más efectiva ya que “reduce el riesgo de hospitalización en hasta 2meses y acorta la estancia hospitalaria”, explican los autores de dicho consenso. De esta forma la vacunación a los adolescentes y especialmente a las embarazadas, en época preconcepcional y el postparto inmediato, son las estrategias más eficaces para prevenir la tosferina en lactantes y jóvenes.
“Las vacunas contra la tosferina han demostrado ser seguras y eficaces, y cada acción que emprendemos hoy determina la salud del mañana. Tenemos la responsabilidad, como padres o como profesionales de la salud pública, de proteger al grupo más vulnerable del impacto mortal de esta enfermedad", ha coincidido Kyriakides tras conocerse los datos de casos de 2023 hasta la actualidad en Europa. 57.000 casos en estos últimos meses con 19 fallecimientos, 11 de los cuales fueron lactantes.