Una investigación del Instituto de Investigación Sanitaria (INCLIVA), del Hospital Clínico de Valencia, sobre el neuroblastoma –el tumor sólido extracraneal más común en la infancia- ha analizado el impacto de la rigidez de la matriz extracelular en el genoma de los neuroblastos malignos con amplificación del gen MYCN (alteración genética que puede estar presente en el 20% de los tumores neuroblásticos y que les confiere una gran agresividad) y su importancia en la realización del diagnóstico, la predicción del pronóstico y el desarrollo de nuevas mecanoterapias.
El neuroblastoma es un cáncer infantil del sistema nervioso simpático que aparece durante los primeros cinco años de vida, especialmente en lactantes. En nuestro país afecta a unos cien niños al año. Se localiza frecuentemente en la glándula suprarrenal y puede ser un hallazgo casual en las revisiones pediátricas. Se estima que aproximadamente el 40% de los niños con neuroblastomas de alto riesgo, entre los que destacan los que sufren tumores con amplificación del gen MYCN, fallecen, por lo que hay que seguir investigando nuevas dianas terapéuticas, de manera rápida, eficaz y teniendo en cuenta el microambiente tumoral.
Se estima que aproximadamente el 40% de los niños con neuroblastomas de alto riesgo, entre los que destacan los que sufren tumores con amplificación del gen MYCN, fallecen
Los resultados de la investigación, dirigida por la doctora Rosa Nogera -coordinadora del Grupo de Investigación Traslacional de Tumores Sólidos Pediátricos de INCLIVA y jefa de grupo del CIBER de Cáncer (CIBERONC)-, acaban de publicarse en Journal of Experimental & Clinical Cancer Research, en un artículo con el título ‘Impact of extracelular matrix stiffness on genomic heterogeneity in MYCN-amplified neuroblastoma cell line’. En esta investigación han intervenido la doctora Amparo López-Carrasco además de Susana Martín-Vañó, la doctora Rebeca Burgos-Panadero, Ezequiel Monferrer, la doctora Ana P. Berbegall, Beatriz Fernández-Blanco y el doctor Samuel Navarro, miembros del grupo de investigación de la Facultad Medicina-Universidad de Valencia/INCLIVA/ CIBERONC.
El estudio surgió de la necesidad de descubrir nuevas dianas terapéuticas aplicables a los pacientes con neuroblastoma de alto riesgo y del creciente interés en buscarlas en los cambios morfológicos de la matriz extracelular, una intrincada red de moléculas en la que están inmersas las células tumorales y que constituye el armazón del tejido tumoral.
La capacidad de las células que componen los tumores para migrar y metastatizar depende, en buena parte, de las características de la matriz que las rodea. En estudios anteriores, estos investigadores observaron que la matriz extracelular es más rígida en los neuroblastomas más agresivos. En esta ocasión han investigado, durante cuatro años, si las propiedades de la matriz (en especial, la rigidez) influyen en cambios genéticos de las células tumorales, pudiéndolas llevar hacia comportamientos más agresivos. Para ello, han utilizado novedosos modelos que simulan la matriz extracelular de los tumores (hidrogeles tridimensionales y ratones genéticamente modificados) y han descrito, por primera vez, que la rigidez de los modelos promueve la aparición de nuevas alteraciones cromosómicas en las células tumorales de neuroblastoma con amplificación del gen MYCN. Además, han encontrado que algunas de estas alteraciones genéticas se mantienen en el tiempo, probablemente confiriéndoles ventajas para crecer en microambientes rígidos.
La principal conclusión del estudio es que las alteraciones cromosómicas tumorales, incluida la heterogeneidad genética, son un reflejo de las características de la matriz extracelular y viceversa
La principal conclusión del estudio es que las alteraciones cromosómicas tumorales, incluida la heterogeneidad genética, son un reflejo de las características de la matriz extracelular y viceversa y, por tanto, deben tenerse en cuenta en el diagnóstico y el pronóstico de los pacientes. Estos resultados son importantes para futuras investigaciones de agentes terapéuticos que interfieran la comunicación de los elementos de la matriz extracelular y las células tumorales de neuroblastoma.