Ignorar el dolor lumbar es dar la espalda a la vida

Nuria Morillo Romero | Madrid

La compañía biofarmacéutica Abbvie, con la colaboración de la Coordinadora Española de Asociaciones de Pacientes con Espondilitis, la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria, la Sociedad Española de Medicina Familiar y Comunitaria, la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia y la Asociación Española de Fisioterapeutas, ha puesto en marcha la campaña “No le des la espalda” para concienciar a la población sobre el dolor de espalda crónico.

Al hablar de dolor de espalda nos referimos a las lumbalgias, dentro de las cuales hay que distinguir dos tipos totalmente distintos. Por un lado están las que provienen de un dolor mecánico, y por otro están sobre las que quieren concienciar con esta iniciativa, el dolor inflamatorio.

El dolor inflamatorio puede deberse a una espondilartritis –reumatismo inflamatorio crónico-, a una infección vertebral o enfermedades como el cáncer, entre otros. Los especialistas afirman que se suele dar en personas jóvenes de menos de 40 años sin discapacidad o lesión, y que el 60% de las causas suele ser la espondilartritis. Se da tanto en hombres como en mujeres, aunque hay una incidencia un poco mayor en los casos masculinos ya que el dolor es más fuerte y suelen acudir antes al médico que el caso femenino que al ser más leve y evolucionar más lento, tardan más en acudir al especialista.

El doctor Jordo Gratacós Masmitja, reumatólogo del Hospital Parc Taulí de Sabadell, afirma que ésta iniciativa pionera en España y que se está realizando al mismo tiempo a nivel mundial en el año de la espondilartritis, quiere reducir el retraso diágnostico, de entre 7 y 9 años, en patologías asociadas al dolor de espalda. El médico asegura que los años de padecimiento de la enfermedad “van acumulando daño irreversible y en última instancia es lo que va a generar grado de discapacidad en el paciente”

Se estima que el 80% de la población tendrá dolor de espalda en algún momento de su vida. 1 de cada 5 personas tiene undolor de espalda de al menos 3 meses de duración, ésta es una de las señales que indica que el dolor es inflamatorio, origen de padecimiento que se da en cera de 1 de cada 20 personas.

El desconocimiento general sobre cómo diferenciar un dolor de otro es la razón por la que, en el marco de la campaña, se ha creado la web www.noledeslaespalda.es, en la que te ofrecen información útil sobre cómo diferenciar un dolor de otro, con testimonios, entre otras cosas, de los propios pacientes que los padecen. En la propia página se enmarca un breve cuestionario de 5 preguntas con las que saber con facilidad si el dolor puede ser inflamatorio. Las cuestiones planteadas son si el dolor comenzó antes de los 40 años, si incrementa gradualmente, si mejora con la actividad o el movimiento, si empeora cuando descansas o si el dolor interrumpe el sueño con una necesidad de levantarse. El doctor afirma que contestando 4 de estas 5 preguntas afirmativamente hay que ir al médico de cabecera para que realice un diagnóstico.

El dolor de espalda inflamatorio está producido por una mezcla genética y ambiental, esto quiere decir que hay una predisposición genética a padecerlo en un gen, b27, que se encuentra en el 10% de la población –de los cuales sólo el 1% desarrolla la dolencia-, y, además, los factores ambientales, como por ejemplo el tabaco,influye en la gravedad de los síntomas y en la falta de eficacia de los fármacos.

Aunque la lumbalgia inflamatoria no tiene cura, cogerla a tiempo mejora la calidad de vida de los pacientes que la padecen. La enfermedad se trata en un principio, y en casos poco avanzados, con antiinflamatorios, si ésta muy evolucionada la patología o el primer tratamiento no funciona, se recurre a una terapia biológica que bloque las moléculas que producen la inflamación.


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