El Reino Unido lleva meses investigando un brote de un tipo de gonorrea resistente a casi todos los antibióticos que ya habría afectado a cuatro personas. Todos los afectados tienen una cosa en común, pasaron sus vacaciones de verano en Ibiza.
La cepa implicada es la FC428, surgida en China o el sudeste asiático y que hasta ahora solo había causado casos esporádicos fuera de ese continente. Este brote es el primer registro de “transmisión local sostenida” en Europa de la cepa, según la agencia de Salud Pública de Inglaterra (PHE, por sus siglas en inglés). La Consejería de Sanidad de Baleares asegura que no ha registrado ningún diagnóstico de FC428.
En Ibiza no se ha registrado ningún caso de gonorrea con esta cepa
Según cuenta El País, el primer caso fue detectado en octubre en una clínica de salud sexual del Reino Unido. La paciente, que sufría molestias en el aparato urinario, explicó que en agosto había pasado unos días de vacaciones en Ibiza, durante los cuales mantuvo relaciones sexuales sin protección.
Después de realizarse las pruebas pertinentes y ponerle un tratamiento a base de antibióticos, los médicos descubrieron que la bacteria gonocócica era inmune al primer fármaco administrado y tenía una resistencia intermedia al segundo.
Un mes más tarde, una segunda mujer acudió a realizarse un chequeo a otra clínica del Reino Unido. Aunque no presentaba ningún síntoma, explicó que había mantenido relaciones sin protección con un hombre que había pasado el verano en Ibiza. Los análisis mostraron que la mujer era portadora de la bacteria. Las pruebas posteriores demostraron que el patógeno que había infectado a ambas mujeres era el mismo.
Cuando las autoridades británicas concluyeron que todos los casos estaban relacionados, se pusieron en marcha los mecanismos de alerta europeos. “Los británicos avisaron al Centro Europeo de Control y Prevención de Enfermedades y este se puso en contacto con nosotros en enero como país potencialmente afectado”, recuerda Julio Vázquez, director del Centro Nacional de Microbiología. .
El siguiente paso fue informar al Gobierno de las Islas Baleares, aunque ninguna de las cepas aisladas en los últimos meses en el Hospital Can Misses de Ibiza ni en la red pública de vigilancia ha mostrado resistencia a los antibióticos ni tener relación con los casos del Reino Unido, añade Vázquez.