España se ha visto afectada recientemente por otro virus que tiene preocupados a los expertos: la fiebre del Nilo, una infección producida por un virus del género flavivirus. “Los pájaros son el reservorio natural, donde no producen enfermedad, y el contagio se produce por la picadura de mosquitos del género Culex”, explica en declaraciones a ConSalud.esJuan González del Castillo, médico del Servicio de Urgencias del Clínico San Carlos y Coordinador del Grupo de Infecciones de la Semes.
La enfermedad, que puede afectar a los equinos y al ser humano, no presenta síntomas en la mayoría de los casos (80 %). “Uno de cada cinco pueden presentar síntomas leves como dolores musculares, dolor de garganta, fiebre, nauseas, vómitos o erupciones cutáneas. En muy raras ocasiones, menos del 1%, puede dar lugar a cuadros graves de meningitis o encefalitis y desarrollar síntomas neurológicos como la obnubilación, coma, parálisis neuromuscular y, en ocasiones, la muerte”.
“El mosquito Culex que origina la trasmisión está presente en la Península, sobre todo en lugares con agua poco profunda y calurosas”
Sin embargo, las complicaciones de esta afección pueden derivar en situaciones más severas, “los pacientes mayores de 60 años o con comorbilidades como la diabetes, la hipertensión o el cáncer tienen mayor riesgo de evolucionar a formas graves de afectación”. No obstante, González del Castillo asegura que la letalidad no supera el 0,1%.
Actualmente, hay ya un total de dos fallecidos y 42 casos que pueden estar asociados a este virus, todos ellos en Sevilla. Esta mayor incidencia en la capital andaluza puede estar provocada porque las aves del entorno ya sean portadoras del virus, “es decir, haya un reservorio animal estable”, explica el coordinador de infecciones de la Semes.
No obstante, el virus podría extenderse por todo el país, “sobre todo en los meses de verano, ya que el mosquito Culex que origina la trasmisión está presente en la Península, sobre todo en lugares con agua poco profunda y calurosas”.
¿CÓMO COMBATIR ESTA AFECCIÓN?
Para combatir esta afección, González del Castillo ha dejado claro que lo mejor es la prevención. “No existe un tratamiento específico para esta infección ni vacuna en estos momentos”.
A este respecto, el doctor insiste en que, por un lado, habría que tomar las medidas necesarias para evitar la proliferación de los mosquitos. Y, por otro, a nivel individual, la utilización de repelentes de mosquitos, la utilización de mosquiteras o el uso de ropa que cubra toda la piel.