Vigo ha sido la última ciudad española en sumarse a la iniciativa Fast-Track Cities, una asociación global de ciudades y municipios comprometidos a actuar para terminar con el VIH como problema de salud pública en 2030 y con este objetivo reducir tanto los contagios por esta y otras infecciones de transmisión sexual (ITS) como las muertes por la enfermedad de sida.
La firma de esta adhesión, que ha tenido lugar este jueves y a la han asistido el alcalde de Vigo, AbelCaballero, como la ministra de Sanidad, CarolinaDarias, supone que España cuente ya con 13 ciudades abrazadas a esta iniciativa: Barcelona, Madrid, Valencia, Sevilla, Bilbao, Vitoria-Gasteiz, Zaragoza, Torremolinos, Murcia, Alcorcón, Palma de Mallorca, San Sebastián y Vigo.
Estas adhesiones a ‘Fast-Track Cities’ supone la firma de la Declaración de París, iniciada en diciembre de 2014 y actualizada en abril de 2021. El objetivo principal es sumar ciudades y municipios en todo el mundo que cumplan los objetivos95-95-95: 95% de personas con VIH diagnosticadas; 95% de ellas con tratamiento antiviral; y 95% con carga viral indetectable. A ellos, se suma el reto de que estas personas sufran ‘0 discriminación’ y que tengan buena calidad de vida.
A nivel mundial, ya hay 203 ciudades en todo el mundo adheridas a la Declaración de París; destacan las 90 firmantes de Europa y las 57 de África
No obstante, el cumplimiento de estos cuatro objetivos sirve como punto de partida hacia un escenario de “cero nuevas infecciones por VIH y cero muertes relacionadas con el sida”. Además, cabe recordar que el Congreso Mundial de ‘Fast-Track Cities’ que tendrá lugar en este 2022 se va a celebrar en Sevilla.
Se trata de una herramienta que cuenta con la Asociación Internacional de Proveedores de Atención del SIDA (IAPAC) como socio técnico de la iniciativa y con el Programa Conjunto de las Naciones Unidas sobre el VIH/SIDA (ONUSIDA), la Organización de las Naciones Unidas Programa de Asentamientos Humanos (ONU-Hábitat), y la ciudad de París como otros socios principales.
A nivel mundial, hasta el mes de marzo de 2022, ya hay 203 ciudades en todo el mundo adheridas a la Declaración de París. Por continentes, se reparten de la siguiente forma: 90 de Europa, 57 de África, 31 de Norteamérica (Estados Unidos y Canadá), 17 de Lationamérica y el Caribe, 13 de Asia y Asia-Pacífico y 2 de Oriente medio.
7 COMPROMISOS ADQUIRIDOS
Estas ciudades, al firmar la Declaración se convierten en “ciudades aceleradas”, tomando el compromiso de unir fuerzas con las administraciones de salud pública, proveedores clínicos y de servicios asistenciales así como con las comunidades y sociedades afectadas para alcanzar los objetivos marcados. Para llegar a ellos, los alcaldes de estos municipios se comprometen con siete objetivos específicos.
En primer lugar, “terminar con el sida como una amenaza para la salud pública para 2030”, asegurando el “acceso sostenido a pruebas, tratamientos y servicios de prevención” para reducir las infecciones por VIH y muertes relacionadas con el Sida e incluso por tuberculosis y enfermedades comórbidas. En segundo término, apuestan por respetar los derechos humanos y poner “a las personas en el centro” de todas las actuaciones, “especialmente vulnerables y marginados”.
Las ciudades y municipios firmantes se comprometen a impulsar políticas de salud pública, prestar servicios equitativos o garantizar el acceso a pruebas de prevención
El tercer compromiso es “abordar las causas de riesgo, vulnerabilidad y transmisión”, para lo que usarán todas las ordenanzas municipales que sean necesarias. En concreto, tratarán de trabajar con colectivos como “personas desplazadas, mujeres jóvenes, trabajadoras sexuales, personas que usan drogas, migrantes, hombres que tienen sexo con hombres y personas transgénero”, entre otros. Mientras, el cuarto objetivo es impulsar una “transformaciónsocialpositiva”.
La quinta responsabilidad es “prestarservicios que respondan a las necesidades locales” y que sean “innovadores, seguros, accesibles, equitativos y libres de estigma y discriminación”. La sexta medida sería “movilizar recursos” hacia políticas de salud pública para cumplir lo propuesto. Finalmente, el séptimo compromiso es actuar de forma “unida” con el resto de ciudades firmantes así como medir los resultados para ajustar las respuestas dadas.
¿CÓMO LO ESTÁN HACIENDO?
Para cumplir con estos compromisos adquiridos, las ciudades han acordado mantener una línea abierta de comunicación con el IAPAC para informar de sus avances. Además, también están propiciando un intercambiodeinformación técnica, epidemiológica y programática, los cuales sirven para mapear los indicadores y objetivos específicos de VIH. El cumplimiento o incumplimiento de ellos puede comprobarse en la web https://www.fast-trackcities.org/.
Junto a estos indicadores, la iniciativa cuenta con un grupo de trabajo o comité asesor que ha desarrollo las métricas que definen el éxito o fracaso de los objetivos marcados, en base a las que las autoridades locales pueden definir sus planes de implementación. Finalmente, las ciudades realizan informes trimestrales para ponerlos a disposición del resto y compartir las mejores prácticas, información que es publicada anualmente por Fast-Track Cities.