La contracepción sigue siendo una cuestión de inequidad y desigualdad en España. A pesar de que hoy en día existen diferentes métodos de anticoncepción, son muchas las mujeres que no pueden acceder a ellos por factores económicos. Así lo ha dado a conocer Ia ginecóloga y portavoz de la Junta Directiva de la Sociedad Española de Contracepción, Isabel Lahoz.
“El uso de los anticonceptivos de larga duraciónaún no está tan extendido como nos gustaría. Desde el punto de vista de los profesionales que trabajamos en el campo de la contracepción, todavía los porcentajes de uso dentro de la población en edad fértil son muy bajos”. De hecho, tan sólo el 10% de la población hace uso de este tipo de anticonceptivos que tienen “mayor efectividad, mayor adhesión al tratamiento y son más seguros”. Los métodos de larga duración son métodos anticonceptivos reversibles que mantienen su efecto a largo plazo y que permiten recuperar la fertilidad tras el cese de su uso. Entre ellos destaca el DIU o el implante subdérmico.
En este sentido, la experta explica que, en estos momentos, los métodos más extendidos son el preservativo y la píldora, que tienen “menor tasa de efectividad en embarazos no deseados”.
“El uso de los anticonceptivos de larga duración aún no está tan extendido como nos gustaría"
Asimismo, la media de edad de uso de anticonceptivos de larga duración es alta: unos 30-40 años. “Suele ser un perfil de mujer que ya ha tenido hijos”. La razón principal es “el difícil acceso a estos métodos” que, a pesar de ser más efectivos, también “tienen un coste mucho más alto”, según los datos de la SEC.
Esta es una de las causas que provoca la “inequidad” existente en España, explica Lahoz. “Algunas comunidades financian estos métodos, pero, en otras, debe adquirirlo cada usuaria”. Aunque a largo plazo es un método más económico, el primer desembolso es grande, por encima de los 100 euros.
Una de las consecuencias de esta inequidad, unida al coste de los métodos, es la “pobreza en la contracepción”. El acceso, “dependiendo de donde vivas, no es fácil ni rápido”, lamenta la experta.
En algunas comunidades españolas, como por ejemplo Aragón, “lo que se ha hecho es que la puerta de entrada a estos métodos esté en la Atención Primaria para que sea mucho más accesible y no haya que esperar a tener una visita con un especialista. La primaria está en todos los rincones de la región, el pueblo más pequeñito tiene un médico de familia”.
Por otro lado, “la financiación es importantísima. Estos métodos, que son los más eficaces en la prevención del embarazo, deberían estar financiados. ¿Por qué una mujer en Aragón tiene más facilidades que una mujer en Madrid?”, critica la ginecóloca.
Solo siete Comunidades Autónomas cubren todos los métodos anticonceptivos
Concretamente, las comunidades autónomas en las que hay un fácil acceso y financiación completa son: Asturias, Cantabria, Aragón, Comunidad Valenciana, Murcia, La Rioja, Islas Baleares y, recientemente Cataluña.
En estos momentos, dado que las competencias en materia de sanidad están transferidas a las comunidades autónomas, no existe una regulación concreta desde el Sistema Nacional de Salud que equipare a todas las mujeres del país.
En el caso de implementarse, “mejoraría la salud reproductiva de las mujeres, que podrían disfrutar de una sexualidad libre y plena, y pudiendo separar fertilidad de sexualidad. Este tipo de métodos da muchísima más libertad porque duran años y no te coartan”, informa Lahoz.
Por otro lado, “disminuyen también los embarazos no deseados, con lo que en última instancia se reducen también las interrupciones voluntarias del embarazo”. De hecho, en el año 2016, tras la implantación de la gratuidad en Aragón, se determinó a través de un estudio, que “el coste económico que suponían los abortos, era mayor que el de la financiación de los métodos anticonceptivos de larga duración para toda la comunidad”.
Por parte de la Sociedad Española de Contracepción, las mayores reivindicaciones en este momento se centran en “la educación sexual como base, siendo esta la gran asignatura pendiente del país. En segundo lugar, el fácil acceso y financiación de los métodos anticonceptivos de larga duración en todo el país para conseguir la equidad de todas las mujeres”, finaliza Isabel Lahoz.