Este mes se ha celebrado la tercera edición del Annual Obesity Meettings, organizada por Novo Nordisk, con los avales de la Sociedad Española de Endocrinología y Nutrición y la Sociedad Española de Obesidad, junto con el doctor Javier Salvador, profesor emérito de la Universidad de Navarra, como coordinador científico de la actividad. Tras esta edición, los expertos han destacado "la individualización, la precocidad y la transversalidad" como las claves en el "éxito del manejo de las personas con obesidad".
Como ha recordado este experto, “la obesidad es una enfermedad crónica extraordinariamente prevalente. En España, si sumamos obesidad y sobrepeso, la prevalencia se encuentra por encima del 62%”.
La jornada se celebró bajo el título de “Marcando el rumbo en la obesidad”. Unos 500 asistentes se reunieron con el "objetivo de realizar una actualización científica global en obesidad en la que no solo se ha realizado una revisión de lo publicado en los distintos congresos del 2022, sino que se abordaron los temas más actuales en el ámbito de la obesidad. Además, se profundizó en temas como el estilo de vida, farmacoterapia, complicaciones de la enfermedad, nuevos procedimientos quirúrgicos, medicina de precisión y obesidad infantil, junto con los avances de mayor interés en investigación traslacional", se ha destacado.
“No hay que olvidar que es una patología crónica y multifactorial. Es una enfermedad que genera más enfermedades como la diabetes, hipertensión arterial, patología psiquiátrica y cáncer, entre otras, por lo que hay que dedicarle más tiempo a su asistencia, así como recursos a nivel social y sanitario”, según el doctor Salvador. El experto afirma que la razón por la que no se considera como tal es porque con frecuencia, tanto la sociedad como profesionales sanitarios, la atribuyen a la propia voluntad de la persona.
“No hay que olvidar que es una patología crónica y multifactorial. Es una enfermedad que genera más enfermedades como la diabetes, hipertensión arterial, patología psiquiátrica y cáncer, entre otras
"Al devaluar las características personales del individuo y culpabilizarlo por una falta de voluntad se produce un estrés mental significativo que potencia la cronificación de la enfermedad. Esta situación es capaz de alterar el comportamiento alimentario y la adherencia al tratamiento, pues lo que es imposible es que una persona estigmatizada no sufra estrés, que es un factor importante en la generación y progreso de la obesidad”.
Este hecho se acentúa aún más cuando la obesidad se presenta en la etapa infantojuvenil. “Un niño con obesidad tiene más del 80% de probabilidades de convertirse en un adulto con obesidad y sufrir las complicaciones derivadas del exceso de masa grasa”. El niño que se encuentra en esta situación "necesita ayuda y no rechazo”. Esta falta de conocimiento dificulta un tratamiento individualizado, por eso el doctor afirma que “el tratamiento precoz individualizado es una oportunidad de acción para poder tratar la enfermedad y reducir su prevalencia, tanto en la etapa infantojuvenil como en el adulto”.
Además, tal y como se puso de manifiesto en el congreso, ya hay medicamentos que han demostrado su eficacia en la adolescencia y se esperan más innovaciones a corto-medio plazo. Al respecto, el doctor comenta que “la individualización a través de posibles biomarcadores para poder establecer la situación de riesgo o instrumentos para tratar de fenotipar las características de cada persona y definir el tratamiento más eficaz en cada individuo son avances que se buscan aplicar a la práctica clínica y trasmitir a la sociedad”.
Una de las novedades más llamativas de este congreso fue la celebración del primer foro de transversalidad en el manejo de la obesidad. Formaron parte profesionales de distintas especialidades médicas: endocrinología, medicina interna, atención primaria, cardiología, ginecología y rehabilitación funcional. Como coordinador científico del congreso, el doctor Salvador explica que “todas las especialidades son importantes en este concepto de transversalidad. Necesitamos que todos los profesionales sanitarios sean conscientes de que recibirán un porcentaje muy alto de personas con obesidad y del impacto que tiene la misma en las patologías que se atiende con más asiduidad en cada especialidad. Sobre todo, hay que buscar la forma de coordinarse entre todas las especialidades para derivar y conseguir una atención especializada para la persona con obesidad entre por la puerta que entre al sistema sanitario”.