Las personas con diabetes deben aprender a tratar su enfermedad de forma correcta, de este modo se evitan posibles complicaciones y mejora la calidad de vida.
Sin embargo, esta enfermedad también supone controlar la glucosa, algo que deben realizar varias veces al día, ya que conocer el nivel de glucosa en sangre en determinados momentos permite ajustar la dieta y determinar la dosis de insulina que debe aplicarse.
Hasta ahora, estos controles se realizaban mediante ‘pinchazos’, por lo que muchos pacientes no se miden la glucosa con la frecuencia recomendada por su médico, debido al dolor o el miedo de estos ‘pinchazos’.
Según la Fundación para la Diabetes, las personas con diabetes han de realizarse cinco o seis controles al día: antes de cada comida dos horas después de comer, antes de ir a dormir, así como antes y después de realizar deporte.
No obstante, a día de hoy existen algunas alternativas a esos ‘pinchazos’ para controlar la glucosa en sangre, como los sensores subcutáneos para la medición continua de la glucemia o para la medición flash.
Las nuevas tecnologías de medición de glucosa ayudan a elegir el tratamiento más adecuado para cada paciente
Y es que, tal y como asegura la Asociación Diabetes Madrid, las nuevas tecnologías de medición de la glucosa ayudan a elegir el tratamiento más adecuado para cada paciente, lo que supone un tratamiento individualizado, con mejores resultados, menos efectos secundarios y mejor calidad de vida.
En España, hay varias alternativas para la administración de la insulina. Las plumas de insulina, una forma cómoda y sencilla para su administración; las bombas de insulina, pequeños dispositivos y portátiles que administran insulina de acción rápida las 24 horas del día a través de un tubo pequeño y una cánula que se implanta bajo la piel y que mide los niveles de glucemia de manera constante, dando lecturas cada cinco minutos durante las 24 horas del día.
Más información en el blog #CeroHipoglucemias.