Este jueves se ha celebrado el webinar 'Enfermedades concomitantes en el VIH', el segundo del ciclo VIH ES 2.0: Ir más allá de la indetectabilidad, un programa de formación online impulsado por SEISIDA y Gilead. El objetivo de este plan, apuntan, no es otro que dar respuesta a los retos que todavía persisten en el manejo de la infección por VIH.
En un encuentro en el que han participado la doctora Mª José Galindo, presidenta de SEISIDA y coordinadora del evento; la doctora Eugenia Negredo, especialista del Hospital Germas Trias i Pujol de Badalona, y Juanse Hernández, activista del Grupo de Trabajo sobre Tratamientos del VIH (GTT-VIH), se ha subrayado que, en la actualidad, "disponemos de fármacos muy seguros y eficaces, gracias a los cuales la supervivencia de las personas que viven con VIH se acerca cada vez más a la de las que no son portadoras del virus".
"Existen más comorbilidades en estos pacientes respecto a la población no infectada. Además, éstas aparecen antes"
La supervivencia que facilitan los tratamientos está permitiendo que la edad de las personas con VIH sea, cada vez, más elevada. De hecho, los especialistas han subrayado que más de la mitad de los pacientes que acuden a consulta tienen una edad superior a los 50 años.
La citada supervivencia ha venido acompañada, de forma paralela, con un aumento de las comorbilidades. "Existen más comorbilidades en estos pacientes respecto a la población no infectada. Además, éstas aparecen antes. Por tanto, se estudia si existe un envejecimiento acentuado o acelerado", expresa la doctora Negredo.
"Debemos tratar de forma correcta los factores de riesgo cardiovascular, aconsejar una dieta saludable y la práctica frecuente de ejercicio"
Para afrontar esta situación, agrega, "debemos tratar de forma correcta los factores de riesgo cardiovascular, aconsejar una dieta saludable y la práctica frecuente de ejercicio". Asimismo, añade,el uso de antirretrovirales podría ser de gran ayuda en la lucha contra las comorbilidades.
Hernández, por su parte, ha asegurado que es preciso "redefinir el concepto de salud" en el contexto de la pandemia de la COVID-19. A su juicio, es necesario incorporar una visión holística, donde se integren áreas tan significativas como la física, la mental y la social de los pacientes y su entorno.