La encefalitis equina ha causado la primera muerte humana del año en Estados Unidos. Se trata de un residente de New Hampshire contagiado de la enfermedad a través de la picadura de un mosquito. Pese a ser el primer fallecimiento, este caso es el quinto confirmado durante el verano en Estados Unidos.
El paciente, un hombre que residía en Hampstead, dio positivo en la prueba de detección de este virus equino y, posteriormente, fue hospitalizado con síntomas graves en el sistema nervioso central, tal y como informó el Departamento de Salud y Servicios Humanos del estado.
En lo que va de año, los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades han notificado otras cuatro infecciones humanas por esta enfermedad en Estados Unidos, según informa Reuters. Cada una de ellas se ha producido en los estados de Nueva Inglaterra, Massachusetts y Vermont, y una en Wisconsin y Nueva Jersey.
En este estado también se ha notificado encefalitis en un caballo y siete lotes de muestras de mosquitos este verano
En New Hampshire no se había detectado casos humanos de este virus equino desde 2014, cuando se documentaron tres infecciones, dos de ellas mortales. Además, en este estado también se ha notificado encefalitis en un caballo y siete lotes de muestras de mosquitos este verano, según informaron los funcionarios estatales.
"Creemos que este año existe un riesgo elevado de infecciones por virus de la encefalitis equina esteroítica en Nueva Inglaterra, dadas las muestras de mosquitos que dieron positivo", afirmó en un comunicado el epidemiólogo de New Hampshire, Dr. Benjamin Chan. "El riesgo continuará durante el otoño, hasta que haya una helada fuerte que mate a los mosquitos".
¿CÓMO AFECTA ESTE VIRUS?
Esta infección puede provocar síntomas similares a los de la gripe, como fiebre, escalofríos, dolores musculares y articulares, además de enfermedades neurológicas graves, incluida la inflamación del cerebro (encefalitis) y de los tejidos que rodean a la médula espinal (meningitis).
Entre el 4 y el 5% de las personas infectadas por esta enfermedad desarrollan encefalitis, aunque el virus mata a aproximadamente un tercio de quienes la padecen. Otros sufren consecuencias físicas y mentales de por vida. Además, esta enfermedad no tiene vacuna ni tratamiento antiviral.
Estados Unidos notifica 11 casos humanos en promedio cada año. Desde que los CDC comenzaron a rastrear los casos en todo el país en 2003, la cantidad de infecciones humanas documentadas en un solo año alcanzó un máximo en 2019 con 38 casos.