La OMS califica el fipronil de "moderadamente tóxico" para los humanos
¿QUÉ ES EL FIPORNIL?El fipronil es un pesticida empleado contra el ácaro rojo. Su uso está prohibido en alimentos en la Unión Europea (UE), aunque la Organización Mundial de la Salud (OMS) lo clasifica dentro de un espectro “moderadamente tóxico” para los humanos. Solo en grandes cantidades puede causar daños hepáticos, a nivel del tiroides o riñones.
Concretamente, los expertos determinan que una persona tendría que consumir al menos 10.000 huevos contaminados, durante un corto periodo de tiempo, para poner en riesgo la salud.
ORIGEN
El 3 de agosto, Holanda informó de que había encontrado cantidades superiores a las permitidas de fipronil en algunas partidas de huevos que podrían suponer, por tanto, un riesgo para la salud. Además, los productos habían sido exportados a Alemania. Supermercados holandeses, alemanes y belgas retiraron numerosos lotes del producto y las autoridades iniciaron investigaciones para determinar el origen de la contaminación.
Los primeros análisis adelantaron que el foco de la contaminación se encuentra en la empresa belga Poultry Vision, el proveedor que supuestamente vendió con la etiqueta “bio” un tratamiento para las gallinas que contenía el pesticida. Sin embargo, la sospecha recae ahora sobre la empresa holandesa Chickfriend, que utilizó fipronil en un tratamiento para las gallinas. Dos administradores de esa corporación han sido detenidos.
Más allá de la seguridad alimentaria, el caso del fipronil supone un fraude, puesto que su uso no es legal en alimentación en la Unión Europea (UE). El mero hecho de que aparezcan trazas en los alimentos, aunque estén por debajo del umbral apto para el consumo, implica una infracción.
19 PAÍSES AFECTADOS
La alerta se extiende, según la Comisión Europea, a Hong Kong y 18 países europeos. Solo en cuatro (Holanda, Bélgica, Alemania y Francia) se ha confirmado la comercialización de huevos con trazas del insecticida. Los otros 14 países han recibido huevos procedentes de las granjas afectadas, cuya producción ha sido bloqueada, pero no se ha confirmado la presencia de fipronil. Se trata de España, Suecia, Francia, Reino Unido, Austria, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Polonia, Rumanía, Eslovaquia, Esloveniay Dinamarca, así como Suiza y Hong Kong.
RIESGO EN ESPAÑA
El Departamento de Salud del Gobierno Vascoha inmovilizado en Bizkaia una partida de unas 22.000 unidades de huevo líquido pasteurizado contaminada con fipronil procedente de Francia, unas 20 toneladas de producto. Ésta es la primera partida de productos contaminados por el insecticida de la que se tiene constancia en España.
La partida había sido enviada a una empresa vizcaína para elaborar productos que entrarían en las cadenas de distribución alimentaria. Una vez recibido el aviso, los servicios de inspección del Departamento de Salud procedieron a la inmovilización de la partida contaminada y evitaron que entrara en ningún proceso de fabricación de productos, "eliminando cualquier tipo de riesgo para la salud pública".
La alerta se extiende, según la Comisión Europea, a Hong Kong y 18 países europeos
POLÉMICA EN BÉLGICAEn Bélgica, donde fueron identificados huevos con fipronil en niveles menores que en los otros países, la Agencia Federal para la Seguridad de la Cadena Alimentaria (Afsca) ha bloqueado la actividad de varias granjas, y la Fiscalía de Amberes ha iniciado una investigación judicial. El asunto ha llegado al Parlamento, donde los ministros de Agricultura y Sanidad, Denis Ducarne y Maggie de Block, comparecerán este miércoles para dar explicaciones. La Agencia de Seguridad Alimentariabelga se ha convertido en objeto de críticas en el país por su supuesta tardanza al reaccionar a la crisis y su falta de comunicación. El caso ha generado confusión y críticas por parte de asociaciones de consumidores, dado que, si bien en Bélgica los primeros rastros de la sustancia se detectaron en junio, la CE afirma que fue informada el 20 de julio del hallazgo.
No obstante, la Afsca afirma que los niveles encontrados en los primeros análisis están diez veces por debajo de los límites considerados de "riesgo" para el consumo humano, ya que el máximo detectado ha sido de 0,096 miligramos por kilo, muy por debajo del límite de 0,72 mg/kg.