La esperanza de vida es uno de los indicadores más importantes para evaluar el estado de salud de las poblaciones. Si bien en el último siglo la esperanza de vida se ha ido incrementando, este hecho no deja de tener a su vez consecuencias sanitarias y sociales. El pasado 2020 ocurrió un evento a nivel mundial que deterioró tanto los sistemas sanitarios como la propia salud de toda la ciudadanía, lo que provocó un descenso en la esperanza de vida en España y el resto de países del mundo.
No obstante, este indicador se ha ido estabilizando en la medida en la que la crisis sanitaria se ha ido desvaneciendo, y la esperanza de vida se ha recuperado. Así queda reflejado en el último informe "Esperanzas de vida en España, 2021", publicado por el Ministerio de Sanidad. Concretamente, estamos hablando de una recuperación de la esperanza de vida de un año. Así, la esperanza en 2021 es de 83,2 años (82,2 en 2020), 80,3 en hombres y 86,1 en mujeres.
Con este dato es posible pulsar el estado de salud de los españoles, cuya esperanza ha crecido en 1,5 años con respecto a 2019. Según explica el ministerio, "la reducción de la mortalidad en el primer semestre de 2021, con respecto a la observada en 2020, fue la que contribuyó en mayor medida a la recuperación de la esperanza de vida". Ese semestre, la esperanza de vida al nacer aumentó 1,3 años.
La esperanza de vida al nacer en 2021 es de 83,2 años: 80,3 en hombres y 86,1 en mujeres
Si atendemos a los datos por comunidades, observamos además que, dado que la Comunidad de Madrid fue la que mostró un mayor descenso en 2020, también es ahora la que muestra un mayor incremento llegando a los 85,3 años (2,1 años más que la media nacional).
En otras comunidades, eso sí, la esperanza de vida al nacer se ha reducido incluso con respecto al 2020. Es el caso de Baleares (-0,2 años), Comunidad Valenciana (-0,2 años), Andalucía (-0,1), Canarias (-0,1), Murcia (-0,1), y Ceuta y Melilla (-0,1).
Si bien como decimos la pandemia supuso un frenazo en la tendencia ascendente de los últimos años, la esperanza ha venido siendo favorable en las últimas décadas. Desde el año 2006 y hasta 2019 aumentó 2,8 años; 3,2 en hombres y 2,2 en mujeres, por lo que esta tendencia que ahora se ha recuperado es innegable. En cuanto a los datos por sexos, en 2021 la diferencia en la esperanza de vida al nacer entre mujeres y hombres era de 5,9 años. Desde 2006, año en que las mujeres esperaban vivir al nacimiento 6,6 años más que los hombres, esta diferencia se ha ido reduciendo.
La Comunidad de Madrid es la que muestra un mayor incremento llegando a los 85,3 años (2,1 años más que la media nacional)
Otro de los datos más llamativos es el de la esperanza a los 65 años. En 2021 fue de 21,4 años; 19,1 en los hombres y 23,4 en las mujeres. Por comunidades autónomas, oscilaba entre los 18,7 de Ceuta y Melilla y los 23,0 de Madrid. Este dato también ha sido favorable desde el 2006, aunque también se aprecia el parón de 2020. Así, en estos años, se ha aumentado en 1,9 años tanto en hombres como en mujeres, contando con el descenso de 1,5 años de la pandemia.
Sin duda en los últimos años se ha ganado vida pero, ¿en qué medida los años ganados son años de buena salud? Para responder esta pregunta, el Ministerio de Sanidad aporta los indicadores de esperanza de vida saludable. El número de años de vida saludable al nacer en 2021 fue 79,4 (77,4 en hombres y 81,4 en mujeres), lo que supone el 95,5% de los años de esperanza de vida vividos sin ninguna limitación. Desde el año 2006 hasta 2019 el número de años de vida saludable al nacer ha aumentado 2,6 años, 3,5 en hombres y 1,7 en mujeres.
No obstante, en 2020 descendieron 1,2 años (1,2 en hombres y 1,1 en mujeres). De esta manera en 2021, el número de años de vida saludable al nacer aumentó 0,7 años 6 (0,7 años en hombres y 0,8 años en mujeres) con respecto a 2020. Con estos datos observamos que, si bien la pandemia supuso un parón en el crecimiento de la esperanza de vida al nacer, este dato se ha ido recuperando, y lo que es más importante: también lo han hecho los años de vida saludable.