Fue el 5 de mayo cuando la Organización Mundial de la Salud (OMS), declaró el fin de la emergencia sanitaria global por la Covid-19. Esta decisión ocurrió 1.221 días después de que la entidad supiera de la enfermedad en Wuhan (China), que era considerada como una neumonía de causa desconocida. Así, el 30 de enero de 2020, el organismo dependiente de las Naciones Unidas declaró una emergencia de salud pública de interés internacional por el brote de esta enfermedad, siendo el nivel más alto de alarma.
Si bien el riesgo ha disminuido considerablemente en los últimos meses, no es menos cierto que siguen aflorando nuevas cepas del virus que precisan de un análisis y seguimiento para monitorizar el impacto que pueden tener en la sociedad. En las últimas fechas, la OMS ha advertido que la nueva variante EG.5 está incrementando los casos a nivel global, si bien no se está traduciendo en un aumento de las hospitalizaciones.
Será a partir de otoño cuando los servicios de salud convoquen a sus respectivos habitantes para administrarles protección de cara a los momentos de mayor circulación, coincidiendo con los meses de invierno
El organismo sanitario internacional de Naciones Unidas ha calificado como "bajo" el riesgo para la salud pública que plantea EG.5, un linaje descendiente de XBB.1.9.2 que se notificó por primera vez el 17 de febrero. Se designó como variante bajo vigilancia el 19 de julio y recientemente la OMS la ha calificado como variante de interés.
Cercanos a septiembre, es preciso recordar que las comunidades autónomas ultiman sus programas de vacunación frente a la gripe estacional. Será a partir de otoño cuando los servicios de salud convoquen a sus respectivos habitantes para administrarles protección de cara a los momentos de mayor circulación, coincidiendo con los meses de invierno.
Una de las primeras en pronunciarse ha sido País Vasco. La consejera de Salud de la autonomía, Gotzone Sagardui, ha afirmado que Osakidetza decidirá a partir de septiembre, en función de los criterios y recomendaciones que formulen los expertos, si pone en marcha una campaña para administrar un nuevo refuerzo de la vacuna contra la Covid-19 y si, al igual que se hizo el pasado año para buena parte de la población, dicho refuerzo se inyecta junto a la vacuna anual contra la gripe.
Sagardui ha reconocido que los datos sobre la evolución de la enfermedad correspondientes al mes de julio ponen de manifiesto un incremento de la incidencia del virus en el País Vasco respecto a los meses pretéritos
Sagardui ha reconocido que los datos sobre la evolución de la enfermedad correspondientes al mes de julio ponen de manifiesto un incremento de la incidencia del virus en el País Vasco respecto a los meses pretéritos. No obstante, la consejera ha subrayado que la situación es "totalmente diferente" a la de los años anteriores.
"Afortunadamente, la situación no tiene nada que ver", ha afirmado Sagardui, quien ha precisado que, pese al incremento de infecciones, estas no están teniendo "el mismo impacto" en la población, debido a que se encuentra "mucho más protegida" por las vacunas y por los contagios previos que haya podido padecer, y a que las nuevas variantes que circulan actualmente son consideradas "de poco riesgo" por la Organización Mundial de la Salud.