El próximo 20 de julio se aprobará el Decreto en el Consejo de Ministros a través del que se permitirá la venta de test de autodiagnóstico de la COVID-19 (conocidos como “test de antígenos” o “test de anticuerpos) en las farmacias españolas. Un esperado anuncio que realizaba hace unas horas la ministra de Sanidad, Carolina Darias, que da respuesta a una demanda ya histórica en lo que llevamos de pandemia por parte de los farmacéuticos.
La titular de Sanidad explicaba que la venta al público de este tipo de pruebas permitirá “identificar de forma más rápida la sospecha de casos positivos, incluso de asintomáticos, como está sucediendo en la población de 12 a 29 años”, y “controlar de manera más eficaz la progresión de la pandemia”.
Desde hace meses los farmacéuticos españoleshan instado al Ministerio de Sanidad a que autorice la venta al público de estos test sin necesidad de prescripción médica. En algunas comunidades autónomas, como es el caso de Madrid, muchos de estos profesionales cuentan con una gran cantidad de estas pruebas de diagnóstico desde el pasado mes de febrero que únicamente podían vender con prescripción médica. Una exigencia que, tal y como ha asegurado Darias tras anunciar la noticia, “constituía una barrera”.
A pesar de que la decisión ha sido celebrada, lo cierto es que España se encontraba a la cola europea en este sentido. Desde hace meses los farmacéuticos han reclamado poder vender este tipo de pruebas diagnósticas en farmacias sin necesidad de prescripción médica con el objetivo de jugar un papel importante en el control de la pandemia. Todo el mundo cuenta con acceso a las farmacias y esto evita desplazamientos y esperas a la hora de realizar una prueba con la que poder confirmar si estamos o no contagiados.
Especialmente en el caso de los contactos estrechos o los asintomáticos. Una petición que los farmacéuticos han realizado en múltiples ocasiones al Ministerio de Sanidad y que únicamente ha sido escuchada en un momento en el que los contagios entre los grupos poblacionales más jóvenes se han disparado y, en la mayoría de casos, con infecciones leves o asintomáticas.
¿EN QUÉ PAÍSES SE PERMITE YA SU VENTA?
Alemania, Países Bajos, Bélgica, Francia, Italia, Austria y Portugal ya venden a sus ciudadanos en farmacias este tipo de pruebas diagnósticas. En algunos casos, incluso pueden adquirirse en otros establecimientos como los supermercados.
En el caso de Francia las farmacias pueden vender estos test desde el pasado 12 de abril. Todos los resultados que sean positivos en COVID-19 deberán ser confirmados mediante una PCR. Para su realización no se requiere supervisión profesional pero únicamente se venden en farmacias y no en otros establecimientos para que un profesional de la salud explique su correcto uso.
Alemania es el país en el que más opciones de compra encontramos. Si adquirimos la prueba en farmacias su precio oscila entre los cinco y los 10 euros. También pueden encontrarse en supermercados como Aldi (pack de cinco pruebas por 25,99 euros) o Lidl (pack de cinco unidades por 21,99 euros)
Austria permite la realización de estos test sin coste en los 2.400 centros autorizados por el gobierno y puede acudirse con o sin cita previa. Cada persona puede conseguir hasta cinco test mensuales de forma gratuita en farmacias. En Bélgica los farmacéuticos deben indicar a los pacientes el procedimiento sobre la realización de la prueba y, en caso de que esta resulte positiva, deberán ponerse en contacto con las autoridades sanitarias.
En el caso de España, la Comunidad de Madrid ha sido la única región que había conseguido asemejarse a nuestros vecinos europeos. El Gobierno capitaneado por Isabel Díaz Ayuso solicitó al Ministerio de Sanidad que se autorizase a las farmacias madrileñas para la realización de test con el objetivo de incrementar la capacidad diagnóstica de la región mediante la realización de cribados poblacionales. El Ministerio finalmente aprobó en febrero la segunda parte de la petición: autorizó a Madrid a la realización de test en farmacias en aquellas zonas con una elevada tasa de transmisión para la realización de cribados.
¿CUÁL ES SU PRECIO?
El Ministerio de Sanidad no ha hecho público todavía el precio de venta que tendrán estos test en farmacias, pero podemos hacernos una idea si vemos los precios que tienen en otros países europeos en los que ya se ha autorizado su venta.
Tal y como informan desde 20 Minutos, en Portugal cada test de antígenos cuesta entre siete y 10 euros. En el caso de Francia la cantidad desciende hasta los 5,20 euros. Si viajamos hasta Bélgica nos encontramos con un precio por unidad de entre siete y ocho euros en función de la prueba que adquiramos.
Alemania es el país en el que más opciones de compra encontramos. Si adquirimos la prueba en farmacias su precio oscila entre los cinco y los 10 euros. También pueden encontrarse en supermercados como Aldi (pack de cinco pruebas por 25,99 euros) o Lidl (pack de cinco unidades por 21,99 euros), tal y como recogen en la citada cabecera.