Las Sociedades Españolas de Anestesiología, Reanimación y Terapéutica del Dolor (SEDAR) y de Medicina de Urgencias y Emergencias (SEMES) han difundido su posicionamiento una vez conocido el plan de “transición hacia una nueva normalidad” anunciado por el Ministerio de Sanidad, recomendando en esta nueva etapa anticiparse a nuevos brotes y recuperar la asistencia médica y quirúrgica.
Destacan el papel realizado por los Servicios de Emergencias y Urgencias en la gestión y atención inicial de estos pacientes, como “primera línea de choque para el diagnóstico, estabilización y salvaguarda frente a la Covid-19 de otras estructuras sanitarias".
Estas entidades piden consolidar las estructuras asistenciales existentes en los Servicios de Urgencias y Emergencias y fomentar el desarrollo de unidades de Cuidados Críticos
Según datos manejados por ambas entidades, "un número muy importante de los pacientes con criterios de ingreso en unidades de críticos (que en algunas Comunidades Autónomas ha superado el 50%) han sido evaluados y tratados por especialistas en Anestesia y Reanimación, convirtiéndose en los principales proveedores de esta atención especializada en numerosos hospitales", tal como exponen.
Consideran que el papel fundamental asistencial de la crisis sanitaria provocada por el coronavirus ha recaído en los servicios de Medicina Familiar y Comunitaria (Atención Primaria); Urgencias y Emergencias. Neumología y Servicios de Medicina Interna. Medicina Intensiva y Servicios de Anestesiología y Reanimación, "sin olvidar la colaboración de todos los profesionales de nuestro Sistema Nacional de Salud", como indican.
NUEVA ETAPA
Para la nueva etapa en puertas, ambas Sociedades Científicas consideran necesario apostar por una medicina trasversal, que utilice de forma racional y continua todos los recursos sanitarios del país, olvidando liderazgos trasnochados y estructuras ineficaces que puedan comprometer la viabilidad de nuestra Sanidad Pública.
Consolidar las estructuras asistenciales existentes en los Servicios de Urgencias y Emergencias y fomentar el desarrollo de unidades de Cuidados Críticos en todos los centros hospitalarios, centralizados en servicios de Anestesia y Reanimación, tal y como acontece en algunos lugares de España y en todo nuestro entorno sociocultural (en concreto, Europa) es otra de sus recomendaciones.
A ello se suma potenciar la asistencia a patologías tiempo-dependientes en los Servicios de Urgencias Hospitalarios (SUH) y Servicios de Emergencias Médicas (SEM), en colaboración con las diferentes especialidades con competencias en estos enfermos, que han visto reducida su atención durante esta primera ola epidémica.
Insisten en equiparar la Anestesia y Reanimación a las directrices europeas y desarrollar la Especialidad de Medicina de Urgencias y Emergencias en España
Recuperar la actividad quirúrgica de manera racional y progresiva, según prioridades y haciendo especial hincapié en la cirugía oncológica, así como garantizar la protección adecuada de todos nuestros profesionales sanitarios, así como la realización de test diagnósticos.
También destacan la renovación de la contratación de urgenciólogos y anestesiólogos que han sido fundamentales en esta pandemia y que lo serán más todavía en un futuro inmediato, recordando que para el correcto funcionamiento de los servicios sanitarios no basta con la contratación de médicos, siendo imprescindibles las diferentes profesiones sanitarias. Garantizar la contratación de personal para satisfacer el incremento de demanda esperada en los próximos meses, así como la resolución de la lista de espera generada.
Otro aspecto sobre el que inciden es que la sanidad española debe homologarse al entorno europeo. Por tanto, es fundamental:
Equiparar la especialidad de Anestesia y Reanimación a las directrices europeas y desarrollar la Especialidad de Medicina de Urgencias y Emergencias en España, con el desarrollo curricular que establece la sección de Urgencias de la Unión Europea de Médicos Especialistas (UEMS), ya implementada en 24 países de la UE, son otros de los aspectos que consideran fundamentales.