El Ministerio de Sanidad ha notificado la detección de los primeros casos de la variante XE del SARS-CoV-2 en nuestro país. A través de la última actualización de la situación epidemiológica de las variantes del coronavirus en España revela que se han identificado ya algunos casos aunque en niveles muy bajos de circulación (inferior al 2%). ¿Qué sabemos sobre esta nueva variante?
El linaje XE es una variante recombinante que resulta de la combinación de los linajes de Ómicron (B.1.1.529, detectada originalmente en Sudáfrica) BA.1 y BA.2. La evidencia científica con la que se cuenta hasta la fecha es bastante limitada, aunque las primeras estimaciones apuntan a que XE podría ser hasta un 10% más transmisible que BA.2, actualmente dominante en gran parte del mundo.
Una variante recombinante surge cuando los virus relacionados intercambian material genético. Sucede cuando virus de dos cepas diferentes (o variantes o subvariantes) coinfectan una misma célula. El material genético de ambos virus puede combinarse y dar lugar a un nuevo virus recombinante. XE no la única recombinante que actualmente se ha identificado sobre el SARS-CoV-2. Se han detectado otras combinaciones como XQ en Reino Unido, XG en Dinamarca, XK en Bélgica o XJ en Finlandia.
Si hablamos de los síntomas, la infección XE no parece producir ninguno diferente a los ya identificados: fiebre, dolor de cabeza, mucosidad, malestar general y cansancio
Si hablamos de los síntomas, la infección XE no parece producir ninguno diferente a los ya identificados: fiebre, dolor de cabeza, mucosidad, malestar general y cansancio.
En base a lo expuesto en estas líneas la pregunta a formular es clara: ¿debemos preocuparnos? La respuesta inmunológica con la que contamos se ha generado a través de la infección natural o mediante la vacunación. En muchos casos y tras la veloz expansión de Ómicron, la inmunidad con la que cuenta parte de la población es híbrida.
La práctica totalidad de los sueros autorizados para su inoculación contra la Covid-19 se dirigen a proteína de pico del SARS-CoV-2, que es básicamente la misma en XE que en BA.2, por lo que no parece que por el momento la variante recombinante pueda contar un escape inmunitario mayor al que ya hemos visto con el resto de variantes del virus identificadas hasta la fecha.