Desde su aparición, la pandemia del coronavirus ya suma más de 18 millones de contagiados y se acerca a las 690.000 víctimas mortales en todo el mundo.
Los profesionales sanitarios son, sin duda, uno de los grupos de la población más afectados por la epidemia. Así lo sugiere un nuevo estudio publicado en Lancet Public Health, que destaca que los trabajadores de atención médica de primera línea con equipo de protección personal (EPI) adecuado tienen un riesgo tres veces mayor de dar positivo por coronavirus, en comparación con la población general.
Además, la investigación, realizada entre 2.035.395 de personas y 99.795 trabajadores de atención médica de primera línea de Reino Unido y Estados Unidos, también señala que los profesionales sanitarios de origen étnico negro, asiático y minoritario tienen más probabilidades de dar positivo por la enfermedad.
Los profesionales sanitarios e origen étnico negro, asiático y minoritario tienen más probabilidades de dar positivo por la enfermedad
Utilizando la aplicación COVID Symptom Tracker, los participantes del estudio proporcionaron información sobre factores demográficos (edad, sexo, raza u origen étnico, estatura y peso y ocupación) e historial médico. Después, informaron sobre cualquier síntoma relacionado con la Covid-19.
Para tener en cuenta las diferencias en la frecuencia de las pruebas entre los trabajadores de atención médica de primera línea y la comunidad en general y el posible sesgo de selección, se utilizó un modelo de probabilidad inversa ponderada para ajustar la probabilidad de recibir una prueba de coronavirus.
La prevalencia de SARS-CoV-2 fue de 2.747 casos por 100.000 trabajadores de atención médica de primera línea en comparación con 242 casos por 100.000 personas de la población en general. Además, al inicio del estudio, el 20,2% de los trabajadores de atención médica de primera línea informó de, al menos, un síntoma asociado con la infección por SARS-CoV-2 en comparación con el 14,4% del resto de la población.
La prevalencia de SARS-CoV-2 fue de 2.747 casos por 100.000 trabajadores de atención médica de primera línea
Asimismo, el estudio subraya que ''entre los trabajadores de atención médica de primera línea, la reutilización del EPI o el EPI inadecuado se asoció con un mayor riesgo posterior de Covid-19''.
''Si bien los trabajadores de la salud que atienden a pacientes con Covid-19 que informaron EPI inadecuado tenían el mayor riesgo de infección por SARS-CoV-2, se evidenció una mayor susceptibilidad a la infección incluso entre aquellos que informaron EPI adecuado. Los trabajadores de atención médica de primera línea que trabajaban en entornos de pacientes hospitalizados y los hogares de ancianos tuvieron el mayor riesgo'', destaca la investigación.