El repunte de los casos que se están produciendo en los hospitales Txagorritxu (Álava) y Basurto (Bizkaia) han situado la cifra de nuevos infectados por coronavirus en Euskadi en máximos desde hace dos semanas, con 36 casos y tres muertes, rompiendo así la tendencia descendente.
Para el Sindicato de Técnicos de Enfermería estos datos, además de preocupantes en sí mismos, son el fiel y evidente reflejo de que el virus aún está presente y que la sociedad no puede bajar la guardia.
"Los profesionales no hemos recuperado la fuerza, ni física ni emocional para encarar repuntes"
Los hospitales no pueden permitirse una situación similar a la vivida y es responsabilidad de todos los ciudadanos que no haya más repuntes en el número de casos.
"Los profesionales estamos literalmente agotados. Estamos haciendo un esfuerzo individual para poder recuperar las fuerzas tanto físicas como emocionales y comprobar estos datos genera miedo y desconfianza ante la incertidumbre", señalan desde el organismo.
Por eso, apelan a la responsabilidad individual de todos. "Como ciudadanos entendemos y compartimos la necesidad de volver a la “nueva normalidad” cuanto antes, pero somos profesionales, lo hemos vivido en primera línea y, simplemente, no podemos permitirnos un aumento de casos".