Por su carácter uniprovincial y por el menor volumen de población, la comunidad autónoma de Cantabria es actualmente una de las que menos ha sufrido las consecuencias de la pandemia de coronavirus en España. Según los últimos datos, se han confirmado 1.796 casos confirmados por Covid-19 en esta región, mientras 120 han fallecido y se han curado 323 personas. Para conocer cómo se ha afrontado esta crisis sanitaria, ConSalud.es ha contactado con Miguel Rodríguez, consejero de Salud del Gobierno de Cantabria.
¿Cómo están afrontando este momento? ¿En qué situación se encuentran actualmente?
Cantabria se encuentra en una situación privilegiada desde el principio de la epidemia, puesto que tuvimos un inicio muy lento y paulatino, lo que nos dio tiempo a prepararnos para los peores escenarios que podrían producirse; después, tuvimos un pico muy rápido de casos, pero que en ningún momento llegó a comprometer la capacidad del sistema sanitario de Cantabria. Ahora estamos en una fase de desaceleración, en la que seguimos teniendo todos los días casos nuevos pero a un ritmo lento, decreciente, y que se compensa con las altas hospitalarias y curaciones.
"Estamos afrontando esta epidemia con serenidad, pero también con mucha preocupación por las consecuencias que va a tener en la población, sobre todo en los colectivos más vulnerables"
Estamos afrontando esta epidemia con serenidad, pero también con mucha preocupación por las consecuencias que va a tener en la población, sobre todo en los colectivos más vulnerables, no sólo en lo que se refiere a carga de enfermedad y fallecimientos, sino también a las repercusiones económicas que va a tener esta crisis.
A parte de las medidas aprobadas a nivel nacional, ¿cuáles han sido las acciones que han impulsado de forma concreta en su comunidad?
Cantabria fue una de las comunidades que se adelantó a la declaración del Estado de alarma a nivel nacional. De hecho, con fechas 5 y 11 de marzo se publicaron resoluciones con limitaciones específicas referidas a eventos deportivos y con fecha 13 de marzo se publicó una resolución por la que se adoptaron medidas preventivas y recomendaciones de salud pública como consecuencia de la evolución epidemiológica de la Covid-19.
Una vez declarado el Estado de alarma a nivel nacional hemos seguido puntualmente las indicaciones del Gobierno de la nación y a nivel regional nos hemos centrado en implementar medidas de gestión y de capacidad asistencial para afrontar la crisis, como son:
- Establecimiento de circuitos diferenciados en los hospitales y centros de salud para los pacientes con patología respiratoria compatible con COVID-19, incluidos puestos de triaje avanzado dónde se ha considerado necesario.
- Incremento de la capacidad de camas de hospitalización y de camas de UCI en todos los hospitales de la región, pudiendo llegar si la situación lo requiriese a dedicar a la pandemia 1.000 camas de hospitalización y 100 camas de UCI.
- Previsión de implementación de otros espacios por si la situación superase las expectativas anteriores.
- Búsqueda de proveedores e intensificación de las compras de material de protección para profesionales y campaña de difusión para fomentar las donaciones de empresas y particulares.
“La vuelta a la normalidad de los centros será relativamente rápida, una vez superemos la fase aguda de la pandemia. Pero recuperar de toda la actividad sanitaria que hemos dejado de hacer puede suponer años”
- Elaboración de procedimientos específicos de actuación para residencias de mayores y centros socio-sanitarios para el COVID-19 (última actualización del 22 de marzo).
- Establecimiento de un cor-auto, como punto de recogida de muestras para realizar PCR a personal sanitario, personal de residencias y establecimientos socio-sanitarios, personal de los cuerpos y fuerzas de seguridad y personal de servicios esenciales.
- En colaboración con la Asociación de Hosteleros de Cantabria, se ha gestionado el uso de establecimientos hoteleros por parte del personal sanitario que no quisiera pernoctar en su domicilio.
¿Cómo cree que será la vuelta a la actividad asistencial habitual? ¿Será posible en un plazo breve de tiempo?
La vuelta a la normalidad de los centros será relativamente rápida, una vez que superemos la fase aguda de la pandemia. Evidentemente habrá cambios en las costumbres y modos de relacionarnos con nuestros pacientes, es decir, creo que la vuelta al funcionamiento habitual de los centros se podrá hacer con relativa rapidez.
“Esta crisis, junto con la que sufrimos con brotes de listeriosis, ha vuelto a poner el foco en la importancia que debiera tener la salud pública en cualquier sistema sanitario”
Cuestión distinta son las consecuencias sanitarias que esta crisis dejará en la población, tanto en términos de carga de enfermedad y secuelas, como en lo que se refiere a la recuperación de toda la actividad que hemos dejado de hacer como consecuencia de esta crisis, algo que incluso puede suponer años.
¿De qué forma ayudará toda esta situación a mejorar en su conjunto a cómo se atiende a los pacientes y se gestiona la sanidad en su región?
Creo que esta crisis, junto con la que sufrimos en nuestro país el verano pasado relacionada con brotes de listeriosis, ha vuelto a poner el foco en la importancia que debiera tener la salud pública en cualquier sistema sanitario. Y no me refiero a las estructuras directivas que las distintas comunidades autónomas dedican a la salud pública y que varían en función de sus posibilidades presupuestarias, sino a las actividades propias de salud pública que deben desarrollarse desde las consejerías y que también tienen que estar integradas en el nivel asistencial de Atención Primaria.
Para que esto pueda desarrollarse tenemos que hacer cambios muy profundos en nuestro sistema sanitario, cambios que, por otra parte, ya eran necesarios antes de la crisis y que implican nuevas formas de organización y de gestión. Tenemos que revisar todo el sistema, desde la forma de relacionarnos con los ciudadanos hasta el sistema retributivo y de contratación de nuestro personal y solamente desde el conjunto del Sistema Nacional de Salud y con flexibilidad y generosidad de todas las partes implicadas (administración, profesionales, usuarios e industria) podremos lograrlo.
"En el ámbito del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud la colaboración y la lealtad entre los distintos territorios ha sido la tónica"
¿Cree que la sociedad se ha sentido protegida por sus instituciones o ha tenido la sensación de que ha tenido más relevancia el interés partidista y/o territorial?
Por lo que se refiere a la necesidad de cuidados sanitarios, creo sinceramente que la sociedad se ha sentido totalmente protegida por las instituciones y profesionales que nos dedicamos a esa labor. El hecho de que espontáneamente los ciudadanos decidieran manifestar su agradecimiento a los profesionales sanitarios públicamente todos los días a las 8 de la tarde es un fiel reflejo de ello. En el ámbito del Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud la colaboración y la lealtad entre los distintos territorios ha sido la tónica.
Cuestión distinta es y será que en un futuro los gobiernos tengan la capacidad económica para proteger a los ciudadanos de las consecuencias económicas que tendrá esta crisis.