El Centro de Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC, por sus siglas en inglés) publicó, recientemente, un estudio preliminar en su publicación 'Emerging Infectious Diseases' en el que asocia el uso del aire acondicionado en un restaurante de China al contagio de coronavirus.
Ahora, con la llegada del calor, se aprecia cierta preocupación por si los sistemas de aire acondicionado pudieran favorecer la infección por CoV-SARS2. Según publican en Xataka, el sentido común nos dice que la confluencia entre el desconfinamiento y la llegada del verano puede generar muchos casos en los que personas infectadas pasen largos periodo de tiempo en espacios cerrados y en contacto continuo con otras personas. Más aún si, como parece con el ejemplo del restaurante de Guangzhou, los sistemas de climatización resultan ser aliados inesperados del SARS-CoV-2.
Hasta el momento no existe evidencia científica que confirme la propagación del virus a través de estos elementos
No obstante, hasta el momento no existe evidencia científica que confirme la propagación del virus a través de estos elementos. La Sociedad Española de Sanidad Ambiental y la Sociedad Española de Salud Pública y Administración Sanitaria han elaborado un documento donde se recogen algunas consideraciones sobre el tema, formuladas desde el ámbito científico y profesional. A nivel general señalan que "no tiene ningún sentido dado que el virus no se puede reproducir sin invadir células humanas".
RECOMENDACIONES
La buena noticia es que casos como el de la comida de Año Nuevo de Guangzhou parecen insinuar que el medio principal de transmisión es el contagio por flujo respiratorio. Por ello, medidas sencillas como impedir la recirculación del aire o usar el filtrado de la máquina pueden ayudar a reducir la exposición al virus.