Durante los últimos años no han dejado de ser la primera causa de muerte en España, pero la mortalidad por enfermedades cardiovasculares estaba a la baja. Hasta que llegó la pandemia. Según los datos de la Estadística de defunciones según causa de muerte correspondientes a 2020, publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE), en 2020 murieron en España 119.853 personas por causa cardiovascular, lo que supuso el 24,3% de los fallecimientos totales.
Esto supone un aumento de un 2,8% respecto a 2019, cuando fallecieron un total de 116.215 personas por esta causa. Así se desprende del análisis realizado por la Sociedad Española de Cardiología (SEC) y la Fundación Española del Corazón (FEC).
“Tras dos años a la baja en el número absoluto de fallecimientos por enfermedades del sistema circulatorio, en el contexto de la pandemia de la Covid-19 se produjo un aumento de las muertes por enfermedades cardiovasculares. El coronavirus ha sido más agresivo entre aquellos que tenían patologías previas, como las cardiovasculares. Aunque tenemos que analizar a fondo estos datos, no podemos perder de vista que 328 personas perdieron la vida cada día en España por causa cardiovascular durante el primer año de pandemia”, subraya el Dr. Julián Pérez-Villacastín, presidente de la SEC.
En todas las autonomías las muertes de mujeres por esta causa mayores que las de hombres
De media, la tasa de muertes fue de 219,4 fallecimientos por cada 100.000 habitantes. Ceuta, Melilla, Andalucía, Murcia y Extremadura fueron las regiones donde se produjeron más fallecimientos por enfermedades del sistema circulatorio. La Comunidad Foral de Navarra (172,8), la Comunidad de Madrid (173,2) y el País Vasco (186,3) son los territorios donde menos muertes se produjeron por enfermedades del sistema circulatorio. Siendo en todas las autonomías las muertes de mujeres por esta causa mayores que las de hombres.
Entre las enfermedades y patologías con mayor mortalidad entre las enfermedades del sistema circulatorio las cerebrovaculares y, en concreto, las enfermedades hipertensivas siguen siendo la principal causa de muerte. En 2020, se inceementó los fallecimientos por hipertensión, 14.271 personas murieron frente a 11.854 del año anterior. "En los últimos 15 años, la mortalidad por esta causa no ha parado de crecer hasta el punto de que, en la actualidad, hay el doble de fallecimientos por esta causa que en el año 2006", recoge el informe de la FEC y la SEC.
“La buena noticia es que tenemos en nuestra mano un gran arma para luchar contra estas enfermedades: la prevención. Y es que, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el 80% de los infartos de miocardio y de los accidentes cerebrovasculares prematuros son prevenibles con hábitos de vida saludables que incluyen una alimentación variada y equilibrada, ejercicio físico de intensidad moderada de forma regular y el abandono del hábito tabáquico”, dice, por su parte el Dr. Carlos Macaya, presidente de la FEC