El número de contagiados por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2 que provoca la enfermedad de Covid-19 ha superado la barrera de los cuatro millones en todo el mundo. Un dato que preocupa a la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya que esta semana son varios los países que han comenzado sus procesos de desescalada con el consecuente levantamiento del confinamiento y de las restricciones a la movilidad.
“Los países han implementado estas estrictas medidas como respuesta a una transmisión comunitaria intensa. Muchos han aprovechado este tiempo para incrementar su capacidad para evaluar, rastrear, aislar y atender a los pacientes ya que es la mejor estrategia para reducir la propagación del virus y aliviar la presión sobre los sistemas de salud”, ha explicado este lunes 11 de mayo su director general, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
Sobre estas medidas ha reconocido el elevado impacto socioeconómico que han supuesto y suponen, pero reconoce que se erigen como la mejor de las estrategias para “frenar el virus y salvar vidas”, aunque han tenido efectos perjudiciales en muchas personas.
“El levantamiento debe ser lento y constante al mismo tiempo que se vigila al virus para que las medidas de control puedan ser implementadas rápidamente si se identifica un repunte de los casos”
En su comparecencia diaria ha recalcado la necesidad de que, para no perder todos los avances logrados y comenzar a contribuir a la reconstrucción de las economías y sociedades, “el levantamiento debe ser lento y constante al mismo tiempo que se vigila al virus para que las medidas de control puedan ser implementadas rápidamente si se identifica un repunte de los casos”.
En este sentido ha recordado las recomendaciones efectuadas por la OMS para guiar a los países a través de procesos de desescalada seguros. Estas se asientan sobre tres pilares fundamentales:
- Asegurarse de que la epidemia dentro del territorio se encuentra realmente bajo control
- Contar con un sistema de la salud capaz de hacer frente a posibles rebrotes que surjan una vez comiencen a relajarse las medidas.
- Contar con un sistema de vigilancia capaz de detectar y gestionar los nuevos casos y a sus contactos.
El director general de la OMS ha señalado que, incluso aunque se pueda responder positivamente a estas premisas, este fin de semana hemos sido testigos de los desafíos que el virus plantea en las fases de desescalada.
“Los estudios serológicos reflejan un porcentaje bajo de población con anticuerpos contra la Covid-19, lo que significa que la mayoría de la población es susceptible al virus”
Ha puesto como ejemplo el caso de Seúl (Corea del Sur) donde se han registrado cerca de un centenar de casos, la mitad contagiados en bares y clubes nocturnos que han procedido a su cierre lo que ha llevado al Gobierno a rastrear a decenas de contactos.
La ciudad china de Wuhan, epicentro de la pandemia ha registrado un nuevo foco desde que levantó la cuarentena y Alemania ha informado de un incremento de los casos como consecuencia de un relajamiento de sus restricciones.
“Afortunadamente los tres países cuentan con sistemas para detectar y responde a un resurgimiento de los casos”, ha manifestado.
Su discurso ha avanzado hasta poner el foco en los distintos estudios de seroprevalencia que se están desarrollando en los distintos países. “Los estudios serológicos reflejan un porcentaje bajo de población con anticuerpos contra la Covid-19, lo que significa que la mayoría de la población es susceptible al virus”.
“La OMS está trabajando en estrecha colaboración con los gobiernos para garantizar que las medidas clave de salud pública se mantengan para hacer frente al desafío que plantea el levantamiento de los bloqueos. Hasta que exista una vacuna, estas medidas son la herramienta más eficaz para abordar la Covid-19”, ha concluido.