El pasado 14 de enero el director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, mantuvo una reunión telefónica con el ministro Ma Xiaowei, director de la Comisión Nacional de Salud de China, centrada en la situación epidemiológica que vive el país desde la finalización de su política de “Covid cero”. Una decisión que ha provocado un estallido de casos como consecuencia de la confluencia de varios factores entre los que destacan falta de inmunidad entre la población, bajas coberturas vacunales (especialmente con dosis de refuerzo) en los adultos mayores y el uso de vacunas que no generan una protección tan elevada como, por ejemplo, las desarrolladas utilizando tecnología de ARNm.
Desde el inicio de la pandemia provocada por el SARS-CoV-2 el gigante asiático ha sido duramente criticado a nivel internacional debido a su hermetismo y falta de transparencia en términos de información sobre el avance del virus dentro de sus fronteras. Recordemos que Pekín incluso vetó la continuación de la investigación puesta en marcha por la OMS para esclarecer los orígenes del coronavirus.
Retomando la referida reunión, los funcionarios chinos han brindado información a la agencia de salud de la ONU sobre aspectos como las clínicas ambulatorias, hospitalizaciones, pacientes que requieren tratamiento de emergencia y cuidados intensivos y muertes hospitalarias relacionadas con la Covid-19, tal y como ha informado la OMS a través de un comunicado. Sus expertos han iniciado el análisis de esta información que abarca desde diciembre de 2022 hasta el pasado 12 de enero de 2023. Unos datos muy valiosos que permiten conformar una fotografía más certera sobre la situación epidemiológica que se vive en el país y el impacto que está teniendo
Los funcionarios chinos han brindado información sobre aspectos como las clínicas ambulatorias, hospitalizaciones, pacientes que requieren tratamiento de emergencia y cuidados intensivos y muertes hospitalarias relacionadas con la Covid-19
El pasado 2 de enero la OMS pedía a Pekín una mayor transparencia en relación a sus datos sobre la Covid-19, así como que fortaleciese su capacidad de secuenciación viral, gestión clínica, impacto de la ola de infecciones y datos sobre las tasas de cobertura vacunal frente a la Covid-19. Ahora que las autoridades chinas parecen haber dado el paso, la OMS incide en la necesidad de que estos datos se compartan de forma continuada.
Los primeros análisis realizados por la OMS revelan que la epidemiología general de la situación que se vive refleja una ola rápida e intensa provocada por subvariantes de la variante Ómicron (B.1.1.529), con un mayor impacto clínico en las personas de edad más avanzada y en aquellas con enfermedades subyacentes. Se trata de una ola similar a las que ya se han vivido en otros países, al igual que sucede con el aumento de la presión sobre los servicios de salud. “Los datos informados indican una disminución en el número de casos, hospitalizaciones y aquellos que requieren cuidados críticos. La OMS ha solicitado un desglose más detallado de los datos por provincias a lo largo del tiempo”, expone a través de un comunicado.
El Centro Chino para el Control y la Prevención de Enfermedades ha informado recientemente de que los sublinajes de Ómicron BA.5.2 y BF.7 son los que actualmente se encuentran en circulación en China. La OMS enfatiza en la necesidad de que China continúe compartiendo muestras de las infecciones para su secuenciación a través de la plataforma internacional GISAID. De esta forma se ampliará el número de análisis filogenéticos y se posibilitará la colaboración con grupos técnicos que estudian la evolución del virus.
“La OMS continuará trabajando con China, brindando asesoramiento técnico y apoyo, y participando en el análisis de la situación. El doctor Tedros ha reiterado la importancia de una mayor cooperación y transparencia de China para comprender los orígenes de la pandemia de Covid-19 y llevar a cabo las recomendaciones detalladas en el informe del Grupo Asesor Estratégico para los Orígenes de Nuevos Patógenos”, remacha el organismo.