El pasado 1 de febrero el Gobierno conseguía sacar adelante la convalidación del Real Decreto-Ley que recoge la obligatoriedad del uso de mascarillas en exteriores debido al escenario epidemiológico de alta transmisibilidad provocada por la variante Ómicron (B.1.1.529, detectada originalmente en Sudáfrica). Una decisión que ha sido duramente criticada por la oposición al considerar que el uso de mascarillas en exteriores es innecesario tal y como señala la evidencia científica.
Apenas 24 horas después la ministra de Sanidad, Carolina Darias, trasladaba a los consejeros autonómicos del ramo en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (CISNS), que el Gobierno está abierto a debatir próximamente con las comunidades autónomas la retirada de las mascarillas en exteriores. Darias reiteraba que se trata de “una medida temporal” supeditada a la evolución de la situación epidemiológica.
La decisión sobre mantener como obligatorio el uso de mascarillas en exteriores ha dividido a las comunidades autónomas. Entre las autonomías que apoyan la decisión del Ejecutivo de Pedro Sánchez se encuentran País Vasco, Comunidad Valenciana, Extremadura, Cantabria o Andalucía han mostrado su apoyo a esta medida. Otras como Madrid, Castilla y León, Galicia o Cataluña han mostrado su completo desacuerdo.
El presidente de la Comunidad Valenciana, Ximo Puig, considera que la obligatoriedad de las mascarillas en exteriores resulta de gran utilidad para recordar que todavía nos encontramos en una pandemia y se debe mantener la precaución. Ha dejado claro que “cualquier retirada tiene ser muy sopesada y prudente”.
El vicepresidente segundo y consejero de Sanidad y Servicios Sociales de la Junta de Extremadura, José María Vergeles, ha expresado en rueda de prensa que la comunidad autónoma secundará la postura que tenga la Ponencia de Alertas del Sistema Nacional de Salud respecto a la obligatoriedad del uso de mascarillas al aire libre. En cualquier caso ha expresado en rueda de prensa que “es necesario que nos dotemos de menos leyes y de más recomendaciones”.
Revilla ha asegurado que, en su opinión, “se cometió un error meses atrás”, cuando se eliminó su obligatoriedad en exteriores
El consejero de Salud y Familias de la Junta de Andalucía, Jesús Aguirre, manifestaba en rueda de prensa que desde la Consejería “ven recomendable el uso de mascarillas en exteriores, máxime cuando estamos en la parte álgida de la sexta ola de este coronavirus, y sin saber a ciencia cierta lo que nos va a venir”.
Por su parte Miguel Ángel Revilla, presidente del Gobierno de Cantabria, se muestra en la línea de Puig al señalar que no llevar mascarillas en exteriores puede darnos una falsa sensación de que “tenemos controlado al coronavirus, y no es así”. Revilla ha asegurado que, en su opinión, “se cometió un error meses atrás”, cuando se eliminó su obligatoriedad en exteriores.
La consejera de Salud vasca, Gotzone Sagardui, ha manifestado que en su Departamento existe “unanimidad” sobre la necesidad de continuar utilizando la mascarilla tanto en exterior como en interior, al tratarse de una medida “de las más eficaces para cortar la transmisibilidad de la Covid”.
“Hay que dejar que los técnicos que lo valoran en la ponencia eleven sus conclusiones a la Comisión de Salud Pública”, aseveraba en la tarde de ayer el consejero de Salud de Asturias, Pablo Fernández Muñiz tras la celebración del interterritorial. “Es la misma posición que mantuvimos cuando algunas comunidades reclamaban lo contrario”.
“Creemos que una estrategia prudente es la estrategia acertada, se ha demostrado en la gestión de la pandemia, y apostamos porque esa medida se pueda revisar lo antes posible siempre vinculada a la evolución de la pandemia, como también en nuestro caso haremos conforme se vaya acercando la fecha del 14 de febrero, aunque nos quedan situaciones como la presión hospitalaria a valorar, para flexibilizar o directamente suprimir estas medidas preventivas”, comunicaba el portavoz del Gobierno de Navarra, Javier Ramírez.
"La mascarilla es importante, ha protegido frente al contagio y en el interior es imprescindible, pero un asunto de esa importancia se debe abordar y consensuar contando con los informes técnicos. Y su uso en el exterior se debe circunscribir exclusivamente a cuando no sea posible mantener la distancia de seguridad"
Juan Camacho, director general de Salud Pública de Castilla-La Mancha ha considerado que “queda poco para que siga siendo obligatoria”, poniendo el foco en que la situación de los países no es la misma y aboga porque cuando cese la obligatoriedad de las mascarillas en exteriores “habrá que hacerlo con toda la prudencia”.
COMUNIDADES AUTÓNOMAS TOTALMENTE EN CONTRA
En el referido CISNS el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, criticada duramente esta medida a las alturas de la pandemia en la que estamos. “La decisión sobre las mascarillas no se debe tomar en función de la situación electoral”, aunque afirmaba que la decisión sobre la eliminación de su uso en exteriores debe ser adoptada en el seno del CISNS.
Alberto Núñez Feijóo, presidente de la Xunta de Galicia, reiteraba su postura de eliminar el uso de las mascarillas en exteriores y reducir las cuarentenas a cinco días en aquellos casos que se trate de personas no vulnerables y que no se encuentren en contacto con colectivos sensibles.
El consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruíz Escudero, trasladaba al seno del CISNS su discrepancia de mantener el uso obligatorio de mascarillas en exteriores siempre que no se produzcan aglomeraciones y pueda mantenerse la distancia interpersonal de 1,5 metros. Subrayaba en la reunión que la obligatoriedad de las mascarillas en exteriores es una medida que carece de base científica.
Desde la Consejería de Sanidad de la Región de Murcia critican que una medida de este calado no se haya consensuado con las comunidades autónomas. “Lo que nos sorprende es que se anticipe la extensión de su uso antes de celebrar el consejo interterritorial de esta tarde (celebrado en la tarde del día 2), y que se pretenda consultar a las comunidades a posteriori, cuando debería ser al revés. La mascarilla es importante, ha protegido frente al contagio y en el interior es imprescindible, pero un asunto de esa importancia se debe abordar y consensuar contando con los informes técnicos. Y su uso en el exterior se debe circunscribir exclusivamente a cuando no sea posible mantener la distancia de seguridad”.