“El Gobierno trabaja en distintos escenarios para la desescalada y en cada momento se comunicarán en la medida que se adopten las decisiones”. Así se ha manifestado este martes María Jesús Montero, portavoz del Ejecutivo, durante la comparencia tras el Consejo de Ministros en el que se ha solicitado el apoyo del Congreso para aprobar una nueva prórroga del Estado de alarma.
Para dar el paso definitivo e iniciar la fase de desescalada, Montero ha reconocido que de forma anticipada el Gobierno tiene “varias posibilidades encima de la mesa”, citando por ejemplo la posible recomendación del uso generalizado de mascarillas entre la población o dar la posibilidad a aquellas personas con coronavirus que no puedan realizar el aislamiento en sus domicilios que puedan hacerlo en otras infraestructuras.
Aunque ha asegurado que “está todo previsto”, ha recalcado que “cuando la evidencia técnica y científica nos lo trasladen, informaremos de las medidas correspondientes”
Sin embargo, la portavoz del Gobierno ha incidido en que serán los técnicos y expertos sanitarios quienes digan por qué línea deben caminar las distintas medidas “según se vaya transmitiendo la el virus durante esta semana y la próxima”. A pesar de que han defendido que “está todo previsto”, ha recalcado que “cuando la evidencia técnica y científica nos lo trasladen, informaremos de las medidas correspondientes”.
En este sentido, Montero ha afirmado que no habrá “especulación” por parte del Ejecutivo central, y menos en lo que respecta al ámbito sanitario. Por ejemplo, con respecto al aislamiento de personas en espacios fuera del domicilio particular, ha indicado que “es prematuro saber qué grupo de personas hablamos si será algo general o restringido”.
COMPENSACIÓN A LOS SANITARIOS
Por otra parte, María Jesús Montero se ha pronunciado sobre la posibilidad de establecer mecanismos de compensación a los profesionales sanitarios por su labor durante esta crisis sanitaria. Al respecto, ha afirmado que en los sistemas autonómicos ya "existen conceptos retributivos aparejados a una mayor intensidad del trabajo del personal sanitario”. En todo caso, ha reconocido que “no habrá dinero que pagara el esfuerzo y el riesgo asumido” por estos profesionales.
Finalmente, ha transmitido la “absoluta confianza” del Gobierno a los datos que diariamente trasladan las comunidades autónomas al Ministerio de Sanidad, a pesar de que en algún momento se produzca “algún desfase”. De esta manera, ha dejado sin respuestas las preguntas de varios periodistas que cuestionaban por una posible diferencia de cifras entre los datos de personas fallecidas aportados por Castilla-La Mancha y las que publica Sanidad.