La falta de mascarillas quirúrgicas, FFP2 y FFP3 en los centros sanitarios que atienden a los pacientes con coronavirus Covid-19 está siendo una de las grandes reivindicaciones de los sanitarios. De ningún tipo. En las farmacias cuelgan carteles que ponen textualmente ‘No nos quedan mascarillas’.
Ponerse una mascarilla es una medida de protección que la población general y sana ha querido tomar, pero las recomendaciones sanitarias al respecto priorizan primero a aquellos pacientes que puedan tener el virus, sean sospechosos de tenerlo o estén enfermos con otras patologías.
Dentro de la cara solidaria que está mostrando esta crisis sanitaria del Covid-19 hay una iniciativa que está surgiendo en todo el país: las modistas y modistos solidarios. Están apareciendo en todo el territorio español, desde el pueblo más recóndito de la montaña hasta en grandes ciudades como Madrid. Para muestra un botón.
Ángel López Hernanz, médico rural en Cañada del Rosal (Sevilla), explica que este movimiento se cuajó de manera espontánea en cada rincón de España. “Una costurera del pueblo le preguntó a mi esposa si podía hacerlas de tela. Le dije que no, que debería ser de un material impermeable para que fueran como las quirúrgicas y lo consiguió”, relata este facultativo andaluz a ConSalud.es. La idea es hacérselas llegar a todas aquellas personas que las necesiten.
DE CEUTA A ZARAGOZA PASANDO POR MADRID
La iniciativa se desarrolla por toda España, desde Cataluña a Ceuta, de Galicia a Madrid o de Ceuta a Asturias. En las redes sociales se pueden encontrar a muchas de ellas, por ejemplo, Mascarillas Solidarias Ceuta o Modistas Solidarias de Zaragoza.
"Debido a la falta de mascarillas en hospitales y centros de salud, se ha solicitado a la población la donación de mascarillas. Si tienes algunas en casa, puedes llevarlas a cualquier centro sanitario. También puedes manufacturar mascarillas caseras de tela para enviarlas a los centros sanitarios y no sanitarios que las necesiten", explica en su web Modistas Solidarias de Zaragoza.
En esta página web se proporciona información, acerca de la manufacturación de las mascarillas y de la entrega de las mismas. Todos funcionan igual, mediante una cadena humana en la que participan ciudadanos pero también la Policía, Guardia Civil, Protección Civil o el sector del taxi, que se encarga de hacerlas llegar a los hospitales y centros de salud.
Peor en esta ola de solidaridad ciudadana, como la cara más amable del coronavirus, es partícipe hasta el ejército, que como se puede ver en el siguiente vídeo, también ha arrimado el hombro para hacer que las mascarillas no falten.