El sector sanitario al completo está implicado desde el inicio con responder ante la crisis originada por la evolución del brote de coronavirus en España. Sin embargo, no todos los trabajadores de todas las profesiones sanitarias cuentan con las garantías necesarias para ejercer su labor de forma segura ni tampoco pueden hacerlo como habitualmente por la importante bajada de volumen de trabajo motivada por el confinamiento de la población.
En el Real Decreto aprobado por el Gobierno este domingo, se regulaba un “permiso retribuido recuperable” para aquellas personas trabajadoras por cuenta ajena “que no presten servicios esenciales” para reducir aún más la movilidad de la población. No obstante, se especificaba que no serían objeto de aplicación de este permiso los trabajadores de servicios esenciales, como aquellos que trabajen en “centros, servicios y establecimientos sanitarios”, sin distinción de ninguna profesión específica.
Colegios de profesionales sanitarios piden que se incluyan a sus colectivos entre los establecimientos de obligado cierre, aunque sí ofrecen sus servicios para intervenciones urgentes
Ante esta situación, varios colectivos han comenzado a denunciara “indefensión” en la que se encuentran actualmente. Es el caso, por ejemplo, de profesionales sanitarios como dentistas, logopedas, fisioterapeutas, terapeutas ocupacionales o nutricionistas. Integrados en el sector sanitario, varios colegios profesionales en todo el país han reclamado al Gobierno que puedan cerrar sus centros de forma legal.
NO SE DAN LAS CONDICIONES DE SEGURIDAD
En la mayoría de casos, reclaman que se incluyan a sus colectivos entre los profesionales de establecimientos de obligado cierre, ya que no aparecen en el RD del estado de alarma. Aún así, sí que ofrecen sus servicios “en los casos en los que nuestra labor suponga una intervención vital y urgente fundamental para la evolución del paciente”.
Desde estos colegios profesionales alegan que muchos de sus trabajadores han tenido que cerrar individualmente “basándose en un gran ejercicio de responsabilidad y en la nula actividad debido a las limitaciones de movilidad, quedando, de esa forma, desamparados en materia laboral determinada por el Consejo de Ministros”.
Estos colectivos reclamal al Gobierno que se decrete el cierre temporal de sus centros sanitarios y clínicas a nivel nacional para poder acogerse a las medidas económicas aprobadas
Este colectivo defiende que “deben ser garantes de seguridad” para ayudar a minimizar la curva de contagios. No obstante, aseguran que en la situación actual “no pueden garantizar ni la seguridad de profesionales ni de los pacientes”. Según exponen, no pueden disponer “de material de protección necesario para los profesionales” o proceder a la “desinfección completa y constante de los centros y materiales utilizados”. Además, denuncian que su trabajo, supone estar “en contacto directo” con los pacientes, lo que multiplicaría el riesgo de contagio.
En el caso concreto de los dentistas, Óscar Castro Reino, presidente del Consejo General de Dentistas, aseguran que “no podemos seguir desarrollando nuestra profesión” debido a que han donado el material de protección a otros centros sanitarios, como solicitaba el Ministerio de Sanidad. Así, sin EPIs, inciden “es imposible llevar a cabo los tratamientos odontológicos con la seguridad necesaria”.
CAMBIO DE REGULACIÓN Y CIERRE DE CLÍNICAS
Todos estos colectivos de profesionales sanitarios aseguran que muchos de sus trabajadores han tenido que cerrar por “obligación”. Ante este panorama, han exigido al Gobierno que se decrete el cierre temporal de estos centros sanitarios y clínicas a nivel nacional, ya que han identificado que algunas comunidades autónomas lo están proponiendo por su cuenta.
Sin embargo, tanto los dentistas como los terapeutas ocupacionales, los fisioterapeutas, los logopedas o los nutricionistas consideran que si no se hace en el ámbito estatal “quedaremos totalmente desprotegidos” al no poder acogerse a ninguna de las medidas económicas adoptadas por el Gobierno”.