La preocupación por la higiene y la seguridad de los productos serán factores clave para el consumidor de dermocosmética en la era post COVID-19. Esta es una de las principales conclusiones del webinar ‘El reto de la dermofarmacia en la época de COVID’, organizado por la Asociación para el Autocuidado de la Salud (anefp) y dirigido a los profesionales de sus comités de Cosmética y Marketing, con el objetivo de analizar los retos y oportunidades que afronta este segmento de autocuidado en el entorno del coronavirus.
Expertos apuestan por potenciar el valor añadido del farmacéutico para los productos de dermocosmética
La dermofarmacia será probablemente uno de los sectores del ámbito consumer health que más cambios experimente en esta etapa, afirma el director general de anefp, Jaume Pey, quien pone en valor el trabajo de la industria para poner en el mercado productos seguros y eficaces que respondan a las necesidades del nuevo consumidor.
“El COVID-19 ha supuesto un terremoto para todo el sector sanitario y también para la dermocosmética”, explica Ambra Orini, cofundadora de la firma The Beauty Makers, agencia dedicada exclusivamente al sector de la belleza pionera en España especializada en crear, incubar y promocionar marcas de belleza únicas. “Los hábitos de compra del consumidor han cambiado de forma drástica y los ingresos disponibles han caído en picado”, añade Orini.
PRIORIDADES DEL CONSUMIDOR
Esto llevará a los clientes a equilibrar sus prioridades de consumo. Según la cofundadora de The Beauty Makers, las cinco prioridades principales del consumidor post COVID-19 son la preocupación por la higiene personal como mecanismo de protección frente a amenazas exteriores. Además, destaca la seguridad de los productos que va a comprar: ingredientes usados, tipo de embalaje, cómo llega a casa... “Hasta un 65% de los consumidores están dispuestos a pagar más por productos que garanticen altos estándares de seguridad”, detalla Orini citando un estudio de mercado de Nielsen.
Por otro lado, el enfoque holístico respecto al bienestar: equilibrio entre mente y cuerpo y belleza por fuera y por dentro. Se trata de una tendencia que se ha visto acelerada por la epidemia de COVID-19. La conexión humana es un elemento crítico para mantener la resiliencia física y mental que también influirá. Las marcas pueden jugar un papel esencial creando comunidades de consumidores. Por último, los consumidores piden más transparencia que nunca a las marcas en aspectos como responsabilidad corporativa o el impacto medioambiental.
"Hasta un 65% de los consumidores están dispuestos a pagar más por productos que garanticen altos estándares de seguridad”
Orini también ha destacado las tendencias más importantes entre los consumidores de dermocosmética durante el confinamiento y la desescalada. Entre ellas menciona a los beauty junkies: consumidores que dedican mucho tiempo a estudiar las marcas y sus productos para elegir aquellos que se alinean mejor con sus valores y expectativas.
Otra tendencia ha sido la preocupación de muchos consumidores por mejorar su rutina diaria de higiene con productos que proporcionan un mayor bienestar y contribuyen a aliviar estrés y la ansiedad provocados por el confinamiento. Además, el confinamiento ha propiciado más tiempo para experimentar con nuevos productos de dermofarmacia.
EL PAPEL DE LA FARMACIA
Durante toda la epidemia, la farmacia se ha visto como un referente de salud y de confianza. “Hay que aprovechar esa confianza que el consumidor tiene en nosotros para recomendarle productos que realmente le aporten valor”, subraya Cristina Tiemblo, vicetesorera del Consejo General de Colegios Oficiales Farmacéuticos (CGCOF).
La vicetesorera del CGCOF destaca también el papel del farmacéutico en la formación de los consumidores para luchar contras bulos, mitos y falsas creencias. “Tenemos que explicar bien cuáles son realmente las propiedades y los beneficios de los productos que vendemos, no generar falsas expectativas y concienciar respecto a la importancia de los hábitos saludables”.
En ese sentido, apuesta por dar valor añadido a los productos de dermofarmacia. “Lo que nos diferencia de otros canales de venta es nuestra capacidad de asesoramiento y tenemos que sacarle partido”, expone Tiemblo.
TENDENCIAS DE FUTURO
“La categoría de cuidado de la piel será la estrella de la dermocosmética en los próximos meses”, sostiene la cofundadora de The Beauty Makers. “El consumidor va a priorizar el valor real del producto por encima de otras consideraciones, lo que añadirá presión a las marcas premium”.
Otra categoría que, en opinión de Orini, gozará de mucha aceptación serán los productos relacionados con el color de ojos (máscaras, perfiladores, sombras de ojos). “Con el uso generalizado de las mascarillas, los ojos son los nuevos labios”.
"Con el uso generalizado de las mascarillas, los ojos son los nuevos labios”
Además, menciona la incorporación de ingredientes desinfectantes y antibacterianos a productos habituales de cuidado personal, como el jabón de manos o los sprays para la piel, como otra de las tendencias de futuro.
“Tenemos que luchar para que nuestros consumidores recuperen la ilusión por la experiencia de compra en la farmacia”, añade Cristina Tiemblo. “Los consumidores van a volver a visitarnos y a interesarse por los productos de dermocosmética, solo hay que darles un poco de tiempo”.