¿Cuáles son los factores genéticos que explican la variabilidad de la sintomatología y la severidad clínica entre los pacientes infectados por la Covid-19? Nos encontramos ante una cuestión de suma importancia a la que se ha intentado dar respuesta desde el inicio de la pandemia provocada por el nuevo coronavirus SARS-CoV-2.
Un grupo de investigadores del Área de Investigación en Vacunas (AIV) de la Fundación para el Fomento de la Investigación Sanitaria y Biomédica de la Comunidad Valenciana (Fisabio), ha puesto en marcha un estudio que trata de encontrar respuestas a esta incógnita. En ConSalud.es hemos profundizado en esta investigación de la mano de Antonio Carmona Serrano, investigador en el Área de Investigación de Vacunas de Fisabio.
La investigación se centra en estudiar los marcadores genéticos en pacientes con SARS-CoV-2 para conocer por qué unos cursan la Covid-19 con síntomas leves y otros con cuadros clínicos graves. ¿Cómo se ha desarrollado el estudio? ¿En qué punto se encuentra actualmente?
Este estudio nació tras la observación de pacientes de Covid-19 que, sin pertenecer a ningún grupo de riesgo, y aparentemente en mismas condiciones de edad y salud, mostraban sintomatología dispar que comprendía entre fiebre leve y tos, hasta requerimiento de ingreso en la UCI y ventilación asistida. Esta observación nos llevó a pensar la existencia de algún motivo intrínseco y específico de cada ser humano que influyera en el curso que toma la enfermedad de laCovid-19. Y nuestra hipótesis es que estas diferencias se pueden atribuir al componente genético de cada individuo.
En el proyecto, que todavía se encuentra en una fase temprana ya que se están buscando formas de financiar el análisis genómico de las muestras, se realizarán estudios comparativos genómicos y transcriptómicos a gran escala en dos grupos de pacientes con distinta severidad clínica ante la infección por Covid-19 (leve frente a grave). El objetivo es detectar y asociar la presencia de polimorfismos (variantes genéticas en la secuencia del ADN) y patrones de expresión de genes con la variabilidad en la respuesta a la infección por SARS-CoV2.
El proyecto ha comenzado con la realización de extracciones de sangre a personas que tuvieron un test PCR positivo para COVID-19 y sintomatología leve.
Un estudio de estas características requiere un amplio espectro colaborativo por parte de pacientes que han padecido la Covid-19 y de centros hospitalarios. ¿Cómo se ha desarrollado y desarrolla este punto?
Se ha buscado la colaboración con otras iniciativas similares a nivel nacional (como por ejemplo INMUNGEN-CoV2) para coordinar y formar una red de centros de salud, tanto de atención primaria como hospitales, que puedan recoger las muestras de interés de los dos grupos a analizar (pacientes leves y graves). Se trata de un estudio retrospectivo que va a requerir de la obtención de muchas muestras para tener resultados significativos, por lo que es fundamental la colaboración nacional e internacional entre diversos hospitales.
"El objetivo es detectar y asociar la presencia de polimorfismos (variantes genéticas en la secuencia del ADN) y patrones de expresión de genes con la variabilidad en la respuesta a la infección por SARS-CoV2"
Además, para el proyecto será fundamental la colaboración con la Red Valenciana de Biobancos (RVB). Las muestras de pacientes graves ingresados en hospital y las de pacientes muy graves en UCI serán aportadas desde los biobancos hospitalarios.
Además del factor marcado por el grado de gravedad con el que se ha cursado la Covid-19, ¿se ha establecido en el estudio alguna caracterización diferencial adicional, por ejemplo, ateniendo al sexo o la edad de los pacientes?
Efectivamente, nuestra idea es llevar a cabo una caracterización diferencial por sexo como estudio complementario. A lo largo de todas las fases del estudio se incluirá la perspectiva de género mediante procedimientos y análisis específicos que permitan la evaluación y caracterización de los mecanismos y biomarcadores diferenciales en la respuesta a la infección por Covid-19 entre hombres y mujeres. También estamos contemplando estudiar, a largo plazo, las complicaciones derivadas de la Covid-19 para analizar hasta que punto, la genética de un individuo puede ser culpable de un mayor o menor grado de complicaciones posteriores.
Desde el inicio de la pandemia han sido muchos los estudios que han puesto el foco en nuestros genes para determinar cómo afecta nuestro ADN a la hora de cursar la Covid-19. ¿Qué nos dice hasta el momento la evidencia científica?
Distintos estudios recientemente publicados han resaltado ya la gran importancia del componente genético en la trayectoria de la enfermedad por Covid-19. Es obvio que muchas condiciones crónicas como hipertensión u obesidad, con un claro componente genético, actúan como factores de riesgo y severidad para la Covid-19. Pero yendo más allá, el estudio de, por ejemplo, pequeñas variaciones genéticas en el receptor ACE2 han demostrado una mayor susceptibilidad al virus y en muchos casos, un peor curso de la enfermedad. Nuestra apuesta sería que muchos genes relacionados con el sistema inmunitario van a ser los más firmes candidatos a albergar estas pequeñas variaciones genéticas, únicas para cada individuo, que determinen la severidad de la Covid-19.
¿Qué implicaciones pueden tener vuestros hallazgos? ¿Pueden mejorar la capacidad predictiva a la hora de realizar la gestión de recursos humanos y hospitalarios?
A corto plazo, nuestros hallazgos podrían contribuir a mejorar el diagnóstico y el manejo clínico de pacientes infectados por SARS-CoV-2, estableciendo una serie de marcadores genéticos que permitan una caracterización genética que determine la severidad de la respuesta frente a la infección por SARS-CoV-2 en la población y con ello aumentar nuestra capacidad predictiva a la hora de gestionar los recursos humanos y hospitalarios en subsiguientes olas pandémicas.
"Nuestra apuesta sería que muchos genes relacionados con el sistema inmunitario van a ser los más firmes candidatos a albergar estas pequeñas variaciones genéticas, únicas para cada individuo, que determinen la severidad de la Covid-19"
Una mejor comprensión de los factores que influyen en la severidad de una enfermedad es clave a la hora de predecir el impacto de una pandemia en la Salud Pública, lo cual permite a su vez mejorar la capacidad de respuesta del sistema sanitario.
¿Qué implicaciones puede tener el estudio de cara a los candidatos a vacuna que actualmente ultiman las últimas fases de sus ensayos clínicos?
Desde luego se podrían mejorar sobremanera los ensayos clínicos de Fase 3, al tener la capacidad de definir y ajustar mejor los distintos grupos de individuos escogidos en dichos ensayos. Por ejemplo, se podrían agrupar los individuos por “tendencia a Covid-19 severo” o “tendencia a Covid-19 leve” y testear distintas dosis y formas de administración de la vacuna para aumentar su eficiencia o respuesta inmunitaria. Del mismo modo, se podrían identificar distintos riesgos potenciales asociados a las vacunas en estos grupos genéticos diferenciados, ya que potencialmente mostrarían distintas respuestas inmunitarias contra la vacuna.
La línea marcada por la investigación abre la puerta a la medicina personalizada contra el coronavirus. ¿En qué punto se encuentra medicina de estas características, basada en el conocimiento genético del paciente, en nuestro país?
En nuestro país, la investigación en medicina personalizada es todavía incipiente. Es cierto que hay distintos grupos trabajando en ello en diversos puntos del país, pero España está todavía por detrás de otras grandes potencias de investigación biomédica en este campo. La aparición de la pandemia de la Covid-19 puede servir como impulso para que más estudios de este tipo se lleven a cabo en nuestro país. Una medicina personalizada con lo cual se podrían administrar adecuadamente los distintos tratamientos o vacunas que surjan a corto/medio plazo es claramente la futura dirección de la medicina, no solo en el campo de las enfermedades infecciosas si no en muchos otros como el del cáncer.
Nuestro estudio actuará como piloto para sentar las bases de futuros estudios enfocados en la identificación rasgos genéticos asociados a la variabilidad a la respuesta a distintos tratamientos de la Covid-19 o en la variabilidad a la respuesta frente a las futuras vacunas contra la Covid-19.
¿Cuándo se prevé la finalización del estudio? ¿Qué conclusiones o evidencias podéis adelantar en estos momentos?
De momento no tenemos plazos, pues estamos todavía faltos de una fuente de financiación potente para continuar el estudio. Si la maquinaria se pusiera en marcha, en cuestión de meses podrían obtenerse los primeros resultados significativos, pues la mayoría de las muestras ya han sido recogidas y depositadas en el biobanco.