Actualmente cuatro son las vacunas contra la Covid-19 que en la Unión Europea (UE) han recibido luz verde por parte de la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés) y han sido autorizadas para su comercialización de emergencia por parte de la Comisión Europea. Hablamos de los sueros desarrollados por Pfizer/BioNTech, Moderna y AstraZeneca que se administran desde hace semanas en los Estados miembros y la vacuna desarrollada por Janssen que comenzará a inocularse próximamente.
A pesar del rápido desarrollo de diversas vacunas, cuya eficacia y seguridad ha sido confirmada a través de ensayos clínicos que han contado con la participación de miles de voluntarios, el avance de la inmunización en el viejo continente continúa siendo excesivamente lento.
Los ambiciosos objetivos marcados por Bruselas y los distintos gobiernos nacionales no se están cumpliendo. La Comisión Europea se había propuesto a fecha de 31 de marzo de 2021 estuviese inmunizado, al menos, el 80% de las personas mayores de 80 años. La cifra, a fecha de 1 de abril de 2021, apenas alcanza el 30%. Un porcentaje que en el caso de España se eleva hasta el 40%. Diversos son los motivos que influyen en el avance de las campañas de vacunación frente a la Covid-19. Entre estos se han sucedido los problemas de producción y suministro de las distintas dosis, así como los incumplimientos de los contratos por parte de algunos fabricantes. ¿Cuál es la realidad de la capacidad de fabricación de vacunas en territorio europeo?
La Unión Europea, Suiza y Reino Unido acogen en sus territorios un total de 61 procesos industriales de fabricación de vacunas que se distribuyen en 56 plantas
De acuerdo a los datos oficiales publicados por Cinco Días (El País), la Unión Europea, Suiza y Reino Unido acogen en sus territorios un total de 61 procesos industriales de fabricación de vacunas que se distribuyen en 56 plantas. Se han exportado 77 millones de dosis a 33 países y la Unión Europea dona 31 millones de vacunas a COVAX, la plataforma impulsada por la Organización Mundial de la Salud (OMS) para hacer llegar las vacunas contra la Covid-19 a los países con bajos y medianos ingresos.
A pesar de que las estrategias nacionales de vacunación de los Estados miembros no avanzan a los ritmos planteados sobre el papel antes de la llegada de las vacunas, lo que es innegable es que el viejo continente se ha convertido en la gran fábrica a nivel global como demuestra la confianza depositada por los fabricantes de vacunas de acuerdo a las cifras anteriormente expuestas. Hecho que ha sido posible gracias no solo a las capacidades con las que ya contaba el sector farmacéutico sino a la vanguardia del mismo.
De las 56 plantas que en la actualidad están funcionando en territorio europeo, 47 se ubican en países pertenecientes a la Unión Europea, seis en Reino Unido y las tres restantes se encuentran en Suiza
Retomando los datos recopilados por Cinco Días vemos que de las 56 plantas que en la actualidad están funcionando en territorio europeo, 47 se ubican en países pertenecientes a la Unión Europea, seis en Reino Unido y las tres restantes se encuentran en Suiza. En estas instalaciones producen sus sueros los fabricantes de vacunas con los que la Comisión Europea ha rubricado los acuerdos de compra conjunta sobre el que trabajan los Veintisiete. Además de las vacunas de Pfizer/BioNTech, Moderna, AstraZeneca y Janssen, la Comisión ha cerrado acuerdos con CureVac y Sanofi/GSK y mantiene avanzadas negociaciones con Novavax y Valneva.
En Europa 32 de estas plantas cuentan con capacidad para elaborar todos los ingredientes necesarios que componen las vacunas frente a la Covid-19. El proceso final de formulación y acabado de los sueros, así como el llenado se realiza en 34 plantas.
Tal y como recogen en la citada cabecera no se cuenta con datos oficiales sobre la cantidad de dosis que estas plantas son capaces de fabricar, pero los datos son bastante cercanos a las cifras que se publican en términos de distribución y exportación. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula Von der Leyen, comunicaba la semana pasada que los fabricantes de vacunas habían distribuido a lo largo del primer trimestre del año más de 100 millones de dosis (de acuerdo a las estimaciones) entre los 27 Estados miembros.
Hasta el pasado mes de marzo la Unión Europea había exportado hasta 77 millones de dosis a un total de 33 países. Se han donado además 31 millones de dosis a COVAX que se repartirán entre 54 países con bajos y medianos ingresos que no cuentan con recursos para acceder a las vacunas. “Esto demuestra que la Unión Europea es la región que más vacunas exporta al mundo. La UE se enorgullece de ser el hogar de los productores de vacunas que no solo entregan a los ciudadanos europeos, sino que exportan a todo el mundo”, destacaba Von der Leyen.