Europa está experimentando demoras en el suministro de medicamentos y mascarillas como consecuencia del coronavirus, según las últimas informaciones hechas públicas por funcionarios de la Unión Europea y agentes del sector industrial.
Estamos en un mundo globalizado en el que la paralización de un eslabón de la cadena, como es el caso de China, puede desestabilizar el suministro global de medicamentos y mascarillas. En estos momentos la Unión Europea se encuentra valorando los retrasos en el suministro de medicamentos procedentes de Asia.
Un escenario sobre el que Francia ha expresado en las últimas horas su alta dependencia en este sentido de China, ya que alrededor del 40% de los medicamentos que importa el país galo procede de China.
Una situación que se complica desde el momento en el que India, principal proveedor global de medicamentos genéricos, depende de China para la elaboración de muchos de sus fármacos. Además, ante el avance del covid-19, India ha decidido restringir algunas exportaciones de medicamentos.
Una situación que se complica desde el momento en el que India, principal proveedor global de medicamentos genéricos, depende de China para la elaboración de muchos de sus fármacos
“Muchos ingredientes farmacéuticos y principios activos se producen en China y el brote de coronavirus está afectando a la capacidad de fabricación del país”, explica en Reuters la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en inglés), organismo perteneciente a la Unión Europea.
“Un situación que podría conducir a una escasez de medicamentos en todo el mundo”, recalca la EMA.
Ante esta fotografía la Comisión Europea ha declarado que, por el momento, no se ha apreciado una escasez de medicamentos en el bloque europeo por el coronavirus. A pesar de su mensaje tranquilizador la Comisión matiza que cualquier problema con los suministros debido al brote de coronavirus podría empeorar la situación en el viejo continente.
SE NECESITAN MÁS MASCARILLAS
Una encuesta realizada en 24 países de la Unión Europea a finales del pasado año indicaba que todas estas naciones habían experimentado escasez de medicamentos a lo largo de 2019. El informe resultante de la consulta dejaba patente que los medicamentos destinados para el tratamiento de afecciones respiratorias no contaban con suficiente disponibilidad a finales del pasado año.
Una situación que se torna complicada ante el avance del covid-19 en Europa ya que el virus produce neumonía y enfermedades respiratorias.
A este escenario se suma el hecho de que Italia, tercer foco global del coronavirus cuenta en el norte del país con numerosas fábricas productoras de medicamentos que abastecen a Europa. Esta región se ha convertido en uno de los principales focos del brote de covid-19 en Europa.
La Comisión Europea ha destacado además que el continente está experimentando un preocupante desabastecimiento de mascarillas así como de otros equipos de protección, debido a la creciente demanda.
Motivo por el que la Comisión inició la pasada semana un esfuerzo conjunto entre 20 países de la Unión Europea. A pesar de los esfuerzos y, aunque se pudiesen asegurar los suministros, es poco probable que pudiesen entregarse antes del mes de abril.
Una escasez que se traduce en un incremento de los riesgos a los que se exponen los profesionales sanitarios. Un preocupante problema ya que si el brote continúa su expansión será necesario poder contar con el mayor número posible de profesionales sanitarios.