Las mascarillas que se venden son de todo tipo, no obstante, no todas son recomendadas para evitar el contagio por el nuevo coronavirus Covid-19. Ante la llegada de este a España, donde se han registrados ya 8 casos, el ministerio de Sanidad recomienda que, en caso de querer usar mascarilla, se utilice el modelo FFP2 (N-95), un producto que también ha recomendado la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Numerosas farmacias españolas no disponen de mascarillas en sus establecimientos
Pero, ¿Dónde adquirir este tipo de producto? El temor a ser contagiado ha provocado un desabastecimiento de mascarillas en muchas farmacias españolas que ya han colgado el ‘Sold out’. Incluso, existen listas de espera en los establecimientos para adquirirlas en cuanto estén disponibles.
Existen personas que, ante la falta de existencia en lugares físicos, han recurrido a la venta online. Amazon ha sido el distribuidor internacional más beneficiado: hasta 1.000 euros por una mascarilla. No obstante, cabe destacar que desde la compañía señalana que son los propios colaboradores comerciales quienens "ponen sus propios precios en nuestra tienda pero tenemos una política para ayudarles a definir los precios de forma competitiva. Rastreamos nuestra tienda de forma activa y retiraremos las ofertas que violen cualquiera de nuestras políticas".
EXIGEN UN USO RACIONAL
En la misma línea, la OMS recuerda que solo el uso de mascarillas no garantiza que no se contraigan infecciones, sino que hay que adoptar otras medidas preventivas: lavarse las manos con frecuencia, seguir medidas de higiene respiratoria y evitar tocarse la nariz, ojos y boca.
Por último, la OMS aconseja el uso racional de las mascarillas médicas para evitar el derroche innecesario de recursos valiosos y su posible uso indebido (véanse los consejos sobre la utilización de mascarillas). Esto significa que solo debe utilizar una mascarilla si presenta síntomas respiratorios (tos o estornudos), si sospecha que tiene infección por el Covid-19 con síntomas leves o si está cuidando de alguien de quien se sospeche que está infectado.