Un estudio donde se ha analizado el agua de cuatro plantas de tratamiento en las prefecturas de Ishikawa y Toyama en el oeste de Japón, ha confirmado la presencia del coronavirus en plantas de aguas residuales, un hallazgo que podría servir como señal para futuros brotes.
El estudio podría usarse para estimar el número de personas infectadas en una región sin evaluar a cada individuo
Según publica hoy Reuters, 27 muestras, 7 fueron positivas para el virus SARS-CoV. El estudio, realizado por la Universidad de la Prefectura de Toyama, la Universidad de Kanazawa y la Universidad de Kyoto, podría usarse para estimar el número de personas infectadas en una región sin evaluar a cada individuo.
"Las pruebas de aguas residuales se utilizan como un sistema de alerta temprana para alertar a las personas sobre la transmisión comunitaria (posiblemente inadvertida)", dijo Yuki Furuse, profesora de la Universidad de Kyoto, tal y como recoge Reuters.