La Dirección General de Salud Pública de la Comunidad de Madrid ha notificado este sábado al Ministerio de Sanidad cinco nuevos brotes con un total de 74 casos, 217 contactos en seguimiento y un fallecimiento.
El primer brote se ha detectado en Leganés, con 19 casos positivos a la infección de COVID-19, tres contactos en seguimiento y una persona hospitalizada. El brote se originó en el ámbito familiar, en una comida que reunió 22 miembros de varias familias.
El segundo brote se ha localizado en un centro socio-sanitario de Pozuelo de Alarcón, con 21 casos y 30 personas en seguimiento. Una persona ha requerido ingreso hospitalario y un residente del centro ha fallecido. El brote afecta a 16 residentes y cinco trabajadores.
El tercer brote se ha originado en el Hospital Universitario Gregorio Marañón, con 15 casos (cuatro con síntomas y el resto asintomáticos) de los que 13 son pacientes y dos profesionales del centro. En total, se está realizando seguimiento a 81 contactos estrechos en el hospital y en el ámbito familiar, todos sin sintomatología.
El tercer brote se ha originado en el Gregorio Marañón, con 15 casos (cuatro con síntomas y el resto asintomáticos) de los que 13 son pacientes y dos profesionales del centro
El cuarto que se ha notificado es correspondiente al brote que obligó a cerrar el Centro de Salud V Centenario en San Sebastián de los Reyes, con 11 casos positivos y 66 contactos (laborales, familiares y sociales) en seguimiento. El centro se mantiene de momento cerrado.
El quinto brote se ha producido en Alcobendas, en un colectivo de actividad social con ocho casos positivos y 37 personas en seguimiento. El objetivo de la detección precoz es, una vez son confirmados los casos, transmitírselo a los técnicos de Salud Pública de manera inmediata, para que el seguimiento y control de los contactos sea inminente, determinando las medidas oportunas de control de los contactos, y evitar así la posible propagación y que dichos brotes sean de menor incidencia.
Desde la Comunidad de Madrid recuerdan a los ciudadanos la importancia de la responsabilidad individual en la adopción y control de las medidas higiénico-sanitarias para evitar la propagación de los contagios: La obligatoriedad del uso de la mascarilla, la frecuente limpieza e higiene de manos, bien con agua y jabón, o con gel hidroalcohólico; y la concienciación de que es una enfermedad que nos afecta a todos, independientemente del rango de edad.