El comité asesor de los Centros para la Prevención y Control de Enfermedades de EE.UU. (CDC) finalizó este miércoles una reunión para estudiar el futuro de la vacuna contra la covid de Johnson&Johnson (J&J), sin atreverse a lanzar una recomendación ante la falta de datos, retrasando la votación sobre la mejor manera de usar la inyección y pidiendo tiempo para seguir investigando. Así lo ha hecho público Reuters.
En concreto, hasta el 12 de abril, se habían administrado más de 6.8 millones de dosis de la vacuna de Johnson & Johnson (Janssen) en los EE. UU. Los CDC y la FDA están revisando los datos relacionados con seis casos de un tipo raro y grave de trombos o coágulos de sangre, uno de ellos con fallecimiento, reportados en personas en este país después de que recibieron la vacuna de J&J. En estos casos, el tipo de coágulos de sangre llamado trombosis de los senos venosos cerebrales (TSVC o, por sus siglas en inglés, CVST) se observó en combinación con bajos niveles de plaquetas (trombocitopenia).
Los seis casos ocurrieron en mujeres de entre 18 y 48 años
Los seis casos ocurrieron en mujeres de entre 18 y 48 años, y los síntomas se presentaron 6 a 13 días después de la vacunación. El tratamiento de este tipo específico de coágulos de sangre es distinto al que se podría administrar normalmente. Por lo general, para tratar los coágulos de sangre se usa un anticoagulante llamado heparina. En este caso, administrar heparina podría ser peligroso y es necesario proporcionar tratamientos alternativos.
Durante la sesión, los científicos debatieron la posibilidad de pedir que la suspensión de la vacunación por un tiempo determinado o aplicarla únicamente a una determinada franja de edad. Sin embargo, ante las discrepancias entre los 15 miembros del comité y la falta de investigación, la situación de la vacuna se encuenra en el limbo.