La pandemia de Covid-19 ha supuesto un reto para el sistema sanitario y para la industria farmacéutica que a contrarreloj ha desarrollado vacunas y medicamentos con los que enfrentar a esta enfermedad.
En este sentido, la investigación no cesa y en el último mes un equipo internacional de científicos liderados por la Universidad de Virginia ha creado una estrategia para acelerar el desarrollo de tratamientos. Es decir, un programa con el objetivo de que los tratamientos efectivos contra la Covid-19 u otra pandemia futura estén disponibles en semanas, en vez de meses o años. Con ello, se mejoraría los tiempos récord conseguidos durante estos dos años con las vacunas y los diferentes fármacos desarrollados.
Según explican, este método permitiría a los científicos estar preparados con un arsenal de medicamentos que podrían trasladarse rápidamente a ensayos clínicos cuando aparezca una nueva infección peligrosa, ya sea un coronavirus u otro patógeno.
Un cóctel de bajo coste, fácil de trasportar y distribuir y fácil de autoadministrar
Para ello la estrategia es, por tanto, priorizar el desarrollo de cócteles de medicamentos. Según los autores del estudio, "reduciría la carga sobre los sistemas de atención médica y ayudaría a prevenir la propagación de la enfermedad al limitar la capacidad de un virus para adaptarse a sus huéspedes". Algo que ya se usa contra virus como el VIH. El emparejamiento de medicamentos, dicen, podría generar tratamientos que sean más efectivos que los medicamentos individuales por sí solos. La identificación de medicamentos con este tipo de “sinergia”, dicen, podría convertir, potencialmente,dos medicamentos con un beneficio modesto en un tratamiento potente.
“Necesitamos desarrollar de forma proactiva cócteles de medicamentos contra las familias de virus en su conjunto, por ejemplo, todos los coronavirus, para estar listos desde el primer día si surge un nuevo virus o variante", señala la investigadora Judith M. White, profesora emérita de la Facultad de Medicina de la Universidad de Virginia.
Un cóctel de bajo coste, fácil de trasportar y distribuir y fácil de autoadministrar .“Esperamos que este concepto de ‘cócteles de medicamentos inteligentes’, inteligentes debido a la elección de medicamentos para probar y modelar por computadora su efectividad en humanos, sea la base para un esfuerzo sólido y coordinado contra los coronavirus y otros virus patógenos, como los virus del Zika y la fiebre de Lassa, solo por nombrar algunos”, concluye.