La publicación este miércoles en el Boletín Oficial del Estado del Real Decreto-ley 3/2021 en el que, entre otras cosas, se recogen las prestaciones causadas por las y los profesionales de centros sanitarios y socio sanitarios que durante la prestación de servicios sanitarios o socio sanitarios han contraído el virus SARS-CoV-2 en el ejercicio de su profesión, ha supuesto un "jarro de agua fría" sobre las expectativas que en el entorno profesional habían generado las informaciones previas a la reunión del Consejo de Ministros en el que supuestamente se iba a declarar la COVID-19 como enfermedad profesional en el personal sanitario.
Desde CESM critican que, en realidad, lo que se ha aprobado es asimilar la COVID19 en el personal sanitario a la enfermedad profesional, es decir, asignar a estos pacientes las mismas prestaciones que si de una enfermedad profesional se tratase, pero sólo a los contagiados durante el periodo que media entre la declaración de la pandemia a nivel internacional y el cese de las medidas para combatirla.
"Demandamos que la COVID19 sea incorporada al catálogo de enfermedades profesionales de las del RD 1299/2006 para el personal sanitario"
"Esta redacción no corresponde con lo que demandamos desde CESM y el resto de las organizaciones profesionales. El SARS-CoV-2 puede mantenerse como una enfermedad prevalente en el futuro, manifestándose también una vez superada la fase pandémica. En esos momentos el personal sanitario, y en especial el directamente implicado en la asistencia a los pacientes con COVID-19, tendrá, precisamente derivado de su actividad profesional, un riesgo añadido, muy transcendente y superior al de la población general en la adquisición de esta enfermedad. Es por ello por lo que demandamos que la COVID19 sea incorporada al catálogo de enfermedades profesionales de las del RD 1299/2006 para el personal sanitario", explican desde el sindicato médico.
Según la organización sindical, lo publicado este miércoles en el BOE es una mejora respecto a la situación establecida en el RD-L 6/2020 en el que esta enfermedad se asimilaba al accidente de trabajo, y en ese sentido es bien recibida, pero es "claramente insuficiente" para satisfacer las demandas de un colectivo que está sufriendo los embates de esta pandemia con especial crudeza y que reclama del Gobierno "mayor sensibilidad y reconocimiento a su esfuerzo, dedicación y compromiso". En este sentido, CESM asegura que seguirá demandándolo en todos los foros posibles y de la manera en que sea necesario hasta conseguir el objetivo.