Alemania, Irlanda e Italia se han convertido en los tres primeros países de la Unión Europea en conectar sus aplicaciones nacionales de rastreo de casos de Covid-19 a la plataforma comunitaria que informará a los ciudadanos de si han tenido contacto con personas infectadas, incluso si han viajado a otro país.
Así lo revelaba hace unas horas la Comisión Europea indicando que las aplicaciones de estos tres países han sido descargadas por más de 30 millones de personas, es decir, dos tercios de todas las descargas de aplicaciones de rastreo de la Unión Europea.
Esta herramienta comunitaria fue activada el pasado 29 de septiembre después de superar con éxito una fase piloto de dos semanas de duración. En esta participaron seis Estados miembro (Alemania, Italia, Irlanda, Italia, República Checa, Dinamarca y Letonia) pero, hasta el momento, ningún país había dado el paso efectivo de conectar su correspondiente aplicación nacional de rastreo de casos de Covid-19 a la plataforma común. Si no se produce ningún retraso está previsto que en los próximos días se sumen a la red común las apps nacionales de Dinamarca, República Checa y Letonia.
Las previsiones de la Comisión Europea indican que a principios del próximo mes de noviembre se sumarán los socios que contribuyeron al desarrollo de la plataforma: España, Austria, Estonia, Países Bajos y Polonia. Se confía en que la veintena de Estados miembro que han desarrollado aplicaciones para el rastreo de casos en sus países se encuentren conectados en esta red común antes de que finalice el año.
Una meta ambiciosa y de una gran importancia ya que esta herramienta permitirá que las aplicaciones nacionales informen a sus usuarios del contacto con casos positivos de Covid-19 durante su estancia en otro Estado miembro en el que se utilice una aplicación de rastreo diferente a la del país de origen, sin necesidad de descargarse una aplicación adicional.
Esta herramienta permitirá que las aplicaciones nacionales informen a sus usuarios del contacto con casos positivos de Covid-19 durante su estancia en otro Estado miembro en el que se utilice una aplicación de rastreo diferente a la del país de origen, sin necesidad de descargarse una aplicación adicional
“La libertad de circulación es una parte integral del mercado interior y el servicio de comparación de datos facilita esto y nos ayudará a salvar vidas”, ha declarado Thierry Breton, Comisario de Mercado Interior de la Unión Europea.
Por el momento el sistema solo funciona con aplicaciones descentralizadas en las que la sincronización de contactos se realiza en los smartphones. En caso de que se mantenga este sistema y no se realicen modificaciones, dos países quedarían fuera de la red comunitaria. Hablamos de los casos de Francia y Hungría en los que sus aplicaciones nacionales de rastreo de casos de Covid-19 se basan en el rastreo mediante servidores centrales.
Reino Unido y Suiza han quedado fuera de esta red. En el caso del primero, las negociaciones aún en desarrollo por el Brexit han impedido un acuerdo entre ambas partes sobre el intercambio de datos sanitarios. La anexión de Suiza se ha visto impedida por el fracaso en el acuerdo pendiente en materia de política sanitaria cuya negociación aún no se ha cerrado.
“En todas las partes de Europa las infecciones están aumentando. Actualmente, las aplicaciones de alerta nacionales están marcando una diferencia en tiempo real”, ha manifestado el ministro de Salud alemán, Jens Spahn, al permitir que las cadenas de infección se rompan “más rápidamente”.
La comisaria de Salud, Stella Kyriakides, ha resaltado que las aplicaciones de rastreo y alerta del coronavirus "pueden completar eficazmente otras medidas, como el aumento de las pruebas de diagnóstico y el rastreo manual de contactos".
"En un momento en el que los casos vuelven a aumentar, pueden desempeñar un papel importante a la hora de romper las cadenas de transmisión. Al funcionar a través de fronteras, son herramientas todavía más potentes", concluye Kyriakides.