Las lecciones aprendidas de la pandemia provocada por el SARS-CoV-2 y la introducción de la “Lista de Diagnósticos Esenciales” de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la atención sanitaria a nivel global cada vez se focaliza más en el importante papel del diagnóstico como palanca impulsora para lograr una cobertura sanitaria universal.
La Atención Primaria se erige como el punto de entrada a los sistemas de salud. El acceso deficiente a los diagnósticos, especialmente en los países con menos recursos, puede provocar una falta de confianza en los sistemas sanitarios y una infrautilización de los mismos. Dos problemas que deben abordarse ya que se traducen en peores resultados de salud, desperdicio de recursos y contribuyen a importantes problemas de salud pública a nivel global como la resistencia a los antimicrobianos en los casos de enfermedades infecciosas. Además, la falta de diagnósticos dificulta el manejo de enfermedades no transmisibles de alta prevalencia.
Un reciente análisis cuyos resultados han sido publicados por PLOS Global Public Health ha evaluado los artículos sobre el tema publicados en varias plataformas entre el 1 de enero de 2009 y el 12 de diciembre de 2019. Se incluyeron estudios observacionales y estudios de métodos mixtos con un componente observacional cuantitativo. Los estudios seleccionados se han centrado en los entornos de Atención Primaria en países de ingresos medios y bajos, según la definición que de estos se desprende del sistema de clasificación elaborado por el Banco Mundial. Se identificaron un total de 22.279 registros, de los que se excluyeron 21.938. De los 341 restantes, finalmente 17 investigaciones se utilizaron como base para el análisis que nos ocupa.
Profundizando en los resultados del análisis vemos que los cinco principales motivos por los que las personas de países con medios y bajos ingresos acuden a las consultas de Atención Primaria (pacientes adultos), son: dolor de cabeza, fiebre, síntomas relacionados con el dolor de espalda, tos y dolores generales y/o múltiples.
Los cinco principales diagnósticos combinados por parte de los profesionales sanitarios fueron: hipertensión no complicada, infección del tracto respiratorio superior, diabetes tipo 2, malaria y mantenimiento y/o prevención de la salud.
El diagnóstico sigue siendo el eslabón más débil en la cadena de la atención de las enfermedades no transmisibles más comunes en los países de medios y bajos ingresos
Los autores del análisis llaman la atención sobre el hecho de que los 10 diagnósticos principales variaron entre los estudios de forma sustancial, más que los 10 motivos principales por los que los pacientes acudieron a centros de Atención Primaria. Por ejemplo, el VIH/sida y la tuberculosis aparecieron en Sudáfrica, mientras que la malaria en Nigeria, siendo el diagnóstico más común en el país. Cabe destacar que las consultas por embarazo en Atención Primaria dependieron de la demografía de cada región y/o país y la organización de los servicios de salud materna.
Dos de los tres principales diagnósticos derivados de esta revisión son enfermedades no transmisibles. La hipertensión no complicada y la diabetes tipo 2 no causan síntomas en muchos casos, al menos en las etapas tempranas, lo que demuestra la importancia de la detección de otras enfermedades más allá de los motivos que llevan a un paciente a la consulta. Los diagnósticos de la hipertensión y la diabetes tipo 2 son simples y deberían estar disponibles, pero el diagnóstico sigue siendo el eslabón más débil en la cadena de la atención de las enfermedades no transmisibles más comunes en los países de medios y bajos ingresos.
Uno de los aspectos más llamativos es la ausencia de síntomas o trastornos psicológicos en las listas de motivos por los que se acude a la consulta en estos países. A pesar de que los trastornos mentales y adictivos provocan aproximadamente el 7% de la carga global de las enfermedades, ninguno de los nueve motivos principales agrupados eran síntomas psicológicos. Más preocupante aún es que uno de los trabajos empleados para este análisis identificó 56 motivos de consulta de Atención Primaria en países de medios y bajos ingresos y ninguno de ellos estaba relacionado con la salud mental. Los autores del estudio indican que esta situación podría derivar de la gran estigmatización que sufren los problemas relacionados con la salud mental en estos países.
La comprensión de los motivos por los que los pacientes acuden a consultas de Atención Primaria, así como los diagnósticos efectuados por los profesionales de la salud en los países de medios y bajos ingresos es de vital importancia para la salud mundial. Un ejemplo que refuerza esta premisa lo encontramos en la malaria. Una enfermedad que, a menudo, se diagnostica en exceso en pacientes con fiebre en entornos de países con medios y bajos ingresos que carecen de acceso a diagnósticos apropiados y que brindan un tratamiento preventivo. Acción que conlleve a un aumento de la resistencia a los antimicrobianos.
Es importante destacar también que recopilación de toda esta información podría ayudar en la identificación de los requisitos de diagnóstico de los proveedores de Atención Primaria en diferentes entornos. Un paso que mejoraría el enfoque de nuevas investigaciones y el desarrollo de futuras tecnologías de diagnóstico.